Searyl Atli, un bebé de ocho meses nacido en Slocan Valley, British Columbia, Canadá, es el primero del mundo en tener en un documento público en el que no se especifica su sexo.
La cartilla de salud de Searyl fue emitida con una "U" de "undetermined" (indeterminado) o "unassigned" (no asignado) en el espacio para completar su sexo. Ahora, su padre, Kori Doty, un transgénero no binario (no se reconoce como hombre ni mujer), lleva adelante una batalla legal para que tampoco se le asigne ningún género a su hijo en el certificado de nacimiento.
"Estoy criando a Searyl de un modo que no tenga su identidad sexual predefinida hasta que tenga un sentido de sí mismo y un control de su vocabulario para que me diga qué es", explicó su padre a la cadena canadiense CBC. "Lo reconozco como un bebé y estoy tratando de darle todo el amor y el apoyo para que pueda ser la persona más completa sin las restricciones que vienen con la caja de niño o niña".
Kori Doty es un educador comunitario parte de la Gender-free ID Coalition (Coalición por un documento sin identidad de género), que esgrime las dificultades que enfrentan aquellos que se sienten diferente al género que se les asigna en su documento al nacer.
"Cuando nací, los médicos miraron mis genitales e hicieron presunciones sobre quién iba a ser yo, y esas presunciones me acompañaron durante mi vida", reflexiona Kori, quien no desea que a su hijo/a le suceda lo mismo. "Esas presunciones resultaron incorrectas y tuve que hacer un montón de ajustes desde entonces", agrega, y sostiene que asignar el sexo al nacimiento es una violación de los derechos humanos del niño.
Las autoridades canadienses se han negado hasta ahora a emitir el certificado de nacimiento sin un género definido. Por eso, su padre ha reclamo a la Corte local.
La abogada que lleva el caso, barbara findlay (que pidió a Global news que su nombre sea escrito en minúsculas), afirmó que "la asignación de sexo es esta cultura es hecha cuando un médico levanta las piernas del recién nacido y mira sus genitales. Pero sabemos que la identidad de género del bebé no se desarrollará hasta algunos años después de su nacimiento".