Nairobi, 27 jun (EFE).- Cuatro niños y cuatro policías murieron hoy después de que el vehículo blindado en el que viajaban pisara una mina de fabricación casera en una carretera del condado de Lamu, en el este de Kenia, informaron medios locales.
"Hay ocho muertos, cuatro de ellos niños y cuatro policías. El ataque ocurrió cuando la policía golpeó un artefacto explosivo improvisado (IED, en inglés)", detalló un oficial de la Policía, quien añadió que también hay "varios heridos" en el ataque.
Los menores iban acompañados por los efectivos policiales y viajaban de la ciudad de Kiunga a Mararani tras haber pasado unos días de vacaciones en casa con motivo de la festividad musulmana Eid al-Fitr.
La semana pasada tres civiles y dos policías murieron en la localidad de Elwak, en el noreste de Kenia, cuando hombres armados irrumpieron en un banco y dispararon a varias personas.
En los últimos meses la milicia Al Shabab ha intensificado los ataques en la frontera con Somalia, donde el grupo ha instalado artefactos en las carreteras que explotan al paso de personas y vehículos.
Desde finales de mayo decenas de personas han muerto en diferentes ataques perpetrados en la zona fronteriza, donde se mantiene el toque de queda desde el anochecer hasta el amanecer debido a las incursiones de los terroristas.
El ejército keniano se encuentra desplegado en la zona próxima a la frontera para intentar contener la entrada de yihadistas a través de la zona boscosa de Baure.
El pasado 12 de junio la policía keniana detuvo a seis presuntos miembros de Al Shabab cuando intentaban entrar en el país con explosivos para perpetrar un ataque terrorista.
Al Shabab, que se adhirió formalmente a la red terrorista Al Qaeda en 2012, ha matado a cerca de 500 personas en Kenia desde abril de 2013 en represalia por el envío de tropas a Somalia para combatir el yihadismo.
El peor atentado de Al Shabab en territorio keniano ocurrió en abril de 2015, cuando 148 personas murieron en el asalto de un comando terrorista a la Universidad de Garissa (norte), cuyas instalaciones mantuvieron bajo su control durante 16 horas.