Dacca, 21 jun (EFE).- Deforestación, falta de planificación y la depredación del terreno son las causas tras de los deslizamientos de tierra que cada año se producen cuando las lluvias empiezan a devorar la tierra en el sur de Bangladesh, un ritual que anualmente completan los políticos culpándose mutuamente de inacción.
Según la organización no gubernamental Fundación Foro Desastre 335 personas han muerto entre 2007 y 2016 en Bangladesh por los deslizamientos de tierras, a los que ya hay que sumar otros 170 que se han producido en los últimos diez días como consecuencia de una intensa lluvia que ha dejado muerto y dolor en seis distritos.
"Las razones para estos desastres son muy comunes", indicó a Efe la presidenta del Departamento de Geografía y Ciencia Medioambiental de la Universidad de Chittagong, Salma Momtaz.
Explicó que los suelos de la zona montañosa del sur, la más afectada por las lluvias, "es muy poco compacta y no puede aguantar mucha presión", un problema que se agrava letalmente por la deforestación de una región en la que "los árboles que sujetaban el suelo están desapareciendo".
Según un estudio de la ONG WaterAid Bangladesh presentado el mes pasado entre 2003 y 2015 se perdieron más de 330.000 hectáreas de bosques en los distritos de Rangamati, Bandarban y Khagrachari, los tres más afectados por la catástrofe que comenzó la semana pasada.
El profesor Ainun Nishat, un experto en cambio climático y profesor emérito de la Universidad BRAC de Bangladesh, dijo a Efe que "las lluvias intensas son las causantes de la mayoría de deslizamientos de tierras" y ahora "la frecuencia de esas lluvias intensas ha aumentado por el cambio climático".
El Departamento Meteorológico de Bangladesh ha registrado 679 milímetros de lluvia desde hace ocho días en Rangamati, donde se produjeron 120 de las muertes.
Nishat señala, no obstante, que "las montañas se hubieran derrumbado con 200 milímetros como consecuencia de las construcciones de carreteras y asentamientos".
"Los pobladores cortan árboles y colinas indiscriminadamente y las autoridades gubernamentales tampoco se preocupan por la ingeniería básica antes de poner en marcha proyectos", declaró a Efe Maruful Hasan, profesor de Ingeniería de la Universidad de Chittagong.
"La naturaleza no puede tolerar tanta intervención humana. Está tomándose la revancha", dijo.
Mientras tanto, el secretario del Ministerio de Gestión de Desastre, Shah Kamal, declaró a Efe que el Gobierno ha decidido tomar medidas para evitar deslizamientos en el futuro.
Entre ellas, la rápida reforestación, eliminar los muros de contención, evitar la alteración del terreno y preservar los canales de agua naturales.
Tampoco se permitirá construir viviendas en lomas con una pendiente de más de 30 grados, habrá una campaña de información y se reubicará en zonas de riesgo.
Sin embargo, ya medidas similares a estas fueron recomendadas en 2007, tras un desastre de similares proporciones a las de este año, pero nunca llegaron a cristalizar.
"Seguramente ha habido a algún progreso, pero no sé porqué no han podido implementarlo completamente", respondió al respecto Kamal.
Y en el medio de esta situación, todo se responsabilizan mutuamente.
El Partido Nacionalista de Bangladesh (BNP, en el poder entre 2001 y 2006) acusa a la Liga Awami, partido de Gobierno, de falta de voluntad política para tomar medidas preventivas.
"La Liga Awami siempre ha dado prioridad a los hombres de su partido frente a la gente. Ocuparon las colinas, quitaron los árboles y cavaron en el suelo. Todo pasó delante de los ojos de las autoridades y nadie hizo nada", afirmó a Efe el exministro regional y dirigente del BNP Amir Khasru Mahmud.
Por su parte, el ministro de Transporte y Puentes, Obaidul Quader, acusó el pasado sábado al BNP de las muertes de este año, responsabilizándoles de permitir 400.000 asentamientos sin planificación previa cuando gobernaban.
Sin embargo, la oposición tiene con qué contraatacar.
La primera ministra, Sheikh Hasina, decidió el martes pasado salir de Bangladesh en medio de la crisis para cumplir una visita a Suecia, mientras en el país se contaban por decenas los muertos.
"Si ella hubiera sido electa por la gente y hubiera que dar explicaciones en el país, no podría haber hecho eso", indicó Khasru, en referencia a la elección de Hasina en 2014, en unos comicios que el BNP boicoteó y en los que no participó.