Kabul, 8 jun (EFE).- Al menos 22 miembros del grupo yihadista Estado Islámico (EI) murieron y dos de sus combatientes resultaron heridos en enfrentamientos con la población civil de la provincia afgana de Nangarhar (este) y en operaciones aéreas en esa zona en las últimas 24 horas, informó hoy una fuente oficial afgana.
Los choques entre miembros del EI y la población local de cuatro aldeas del distrito de Pachir-Agam, que contaron con apoyo aéreo, comenzaron ayer por la noche y se saldaron con doce terroristas muertos y dos heridos, y la muerte de dos civiles.
"Las fuerzas de seguridad también ayudaron a los civiles en la lucha contra el EI", indicó en un comunicado Attaullah Khogyanai, portavoz del gobernador de la provincia de Nangarhar, una de las más inseguras de Afganistán.
Más de un centenar de familias se encuentran desplazadas a causa de los enfrentamientos, añadió.
Por otro lado, otra decena de miembros del EI, entre los que había extranjeros, fallecieron en ataques aéreos de las fuerzas armadas afganas y estadounidenses en el distrito de Koat, en la misma provincia.
Nangarhar está considerada uno de los bastiones del EI en el país y el pasado abril fue objetivo del bombardeo de EE.UU. con un proyectil GBU-43, conocido como "la madre de todas las bombas", que produjo cerca de un centenar de bajas al EI, según fuentes oficiales.
Pese a ello, el grupo yihadista perpetró un ataque en mayo contra un convoy de la OTAN que dejó nueve personas muertas y 28 heridas y ese mismo mes asaltó una sede de la Radio Televisión Nacional de Afganistán (RTA) en Nangarhar, donde fallecieron 10 personas y otras 24 resultaron heridas.
Estados Unidos, que mantiene a cerca de 8.400 militares en Afganistán, como parte del operativo de la OTAN y en tareas antiterroristas, ha situado la eliminación del EI en este país como una de sus prioridades.
Afganistán vive un recrudecimiento de la violencia desde el final de la misión militar de la OTAN el 1 de enero de 2015 y la semana pasada sufrió el peor atentado desde la invasión de EE.UU. en 2001 con un ataque con camión bomba en Kabul que provocó 150 muertos.