Dacca, 31 may (EFE).- El ciclón "Mora" golpeó con especial virulencia los campamentos de los refugiados rohinyás situados en el sureste de Bangladesh, en la frontera con Birmania (Myanmar), con más de 16.000 viviendas dañadas y miles de personas a la intemperie.
La Organización Internacional para la Migración (IOM), que coordina las labores de ayuda entre los rohinyás en los campamentos de refugiados en Bangladesh, cifró en 16.010 las viviendas de esta minoría destruidas o dañadas por el ciclón que azotó ayer el país.
"Nuestra prioridad ahora es comida, refugios, servicios de salud, así como agua e instalaciones sanitarias", dijo a Efe la directora local de IOM, Sanjukta Sahan, que anotó que los más afectados están en el distrito de Cox's Bazar (sureste).
Uno de los refugiados rohinyás afectados, Mohammad Enam, explicó a Efe que aunque la casa en la que vive con los ocho miembros de su familia quedó parcialmente dañada, los destrozos no han sido muy severos y podrá arreglarlos cuando amaine del todo la tormenta.
Enam, sin embargo, llamó la atención sobre la situación en la que se encuentran los refugiados recién llegados tras los brotes de violencia contra esta minoría registrados el pasado octubre en Birmania, que poseen viviendas mucho más precarias que la suya.
"Más del 95 % de las casas construidas por los recién llegados han quedado completamente destruidas", aseguró el veterano refugiado, parte de los entre 300.000 y 500.000 rohinyás que viven en Bangladesh, según cálculos extraoficiales.
Enam rememoró cómo al pasar la parte más severa del "Mora", que llegó ayer al país en forma de tormenta tropical, las lluvias posteriores complicaron mucho la situación de aquellos que se habían quedado sin techo, que pasaron la noche a la intemperie y además "perdieron los alimentos que pudieran tener almacenados".
Según el rohinyá, la ayuda humanitaria aún no ha llegado al campamento, uno de los dos centros oficiales que hay en la región donde viven 33.140 refugiados.
El secretario interino del Ministerio bangladesí de Gestión de Desastres, Golam Mostafa, señaló a Efe que los campamentos de refugiados rohinyás no eran su mayor prioridad, pues "no se encuentran entre los más afectados" por el ciclón.
El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), aseguró sin embargo a través de un comunicado que "la mayoría de las casas de los refugiados sufrieron daños" y que un 20% de ellas quedaron "completamente destruidas".
"Muchos refugiados han perdido también sus raciones de comida, combustible y material de cocina. El Programa Mundial de Alimentos está distribuyendo galletas energéticas para ayudarles a salir adelante", sentenció ACNUR en la nota.
El ciclón "Mora" dejó a su paso por el sur de Bangladesh al menos 7 muertos y 60 heridos, además de unas 60.000 viviendas dañadas y unas 224.000 personas afectadas.