Un elefante mató a un cazador sudafricano en Zimbabue al caer sobre él tras recibir un disparo, informaron este lunes responsables y medios locales.
Theunis Botha, de 51 años, un profesional especializado en la caza con perros, murió el viernes en el oeste del país africano. Lideraba a un grupo de cazadores en la región de Gwayi cuando cuatro elefantes hembras cargaron contra ellos para proteger a sus crías.
Uno de los elefantes levantó a Botha con su trompa, y otro cazador abatió al animal de un disparo, según la web de información News24. Al caer, el animal aplastó a Botha, causándole heridas mortales.
Simukai Nyasha, portavoz de la autoridad que gestiona los parques y la naturaleza en Zimbabue, confirmó la muerte a la AFP.
"El desafortunado incidente ocurrió cuando los cazadores llegaron al centro de una manada de crías de elefantes y fueron atacados por hembras", explicó, añadiendo que la cacería estaba autorizada.
Botha, padre de cinco hijos, organizaba "caza de trofeos" para clientes, a menudo de Estados Unidos, dispuestos a pagar miles de dólares para matar a leopardos, jirafas, elefantes y otros animales.
En abril un niño sudafricano falleció un día después de cumplir 12 años tras tres semanas en coma por las heridas sufridas al ser atacado por un león.
El menor, que vivía en Pretoria y responde al nombre de Kristian Prinsloo, sufrió daños en la tráquea y en dos vértebras del cuello durante el ataque, que se produjo en la finca de su abuela en las afueras de la localidad de Lephalale (en la provincia norteña de Limpopo).
Según el padre de Kristian, Herman Prinsloo, el animal -que estaba domado y vivía en una finca cercana- entró por sorpresa en la cocina y se lanzó al cuello del niño antes de que éste pudiera huir.
