YAKARTA, Indonesia (AP) — Un dragón de Komodo mordió en Indonesia a un turista excesivamente curioso que ignoró las advertencias y se acercó demasiado al enorme reptil cuando estaba comiendo, según dijo el jueves el responsable del parque nacional.
El turista de Singapur recibió un mordisco en la pierna el miércoles por la mañana cuando hacía fotos del dragón de Komodo, que es el lagarto más grande del mundo, explicó el responsable del Parque Nacional Komodo, Sudiyono.
El hombre fue rescatado por lugareños y trasladado a un hospital en Labuan Bajo, en la isla de Flores, cerca de la isla de Komodo, para recibir tratamiento, explicó Sudiyono.
El dragón de Komodo es una especie en peligro que vive en libertad en varias islas del este de Indonesia. Puede alcanzar una longitud de 3 metros (10 pies) de largo o más.
Los ataques a humanos son poco habituales, pero podrían aumentar ahora que Indonesia promociona el Parque Nacional de Komodo como destino turístico. Un guía y un guarda del parque fueron atacados en 2013 en incidentes separados.
La población de dragones de Komodo salvajes es de menos de 4.000 ejemplares pero se mantiene estable, según los expertos.
Un grupo de científicos descubrió que la sangre de los dragones de Komodo podría tener propiedades curativas y funcionar como antibiótico para las personas. Una noticia que no deja de ser sorprendente, ya que estos animales pueden resultar letales para el ser humano.
Aunque se trata de una especie que escasea en el mundo, existen episodios en los que los dragones de Komodo han atacado a personas y han terminado provocándoles la muerte. Su mayor peligro no reside en el veneno que puedan inocular o el daño que puedan infligir, sino en unas bacterias que contiene su saliva que resultan letales para el ser humano.