Casi 1,4 millones de niños están en "riesgo inminente" de morir de hambre en Nigeria, Somalia, Sudán del Sur y Yemen, dijo el martes la agencia para la infancia de Naciones Unidas, UNICEF.
La población se está muriendo de hambre en estos cuatro países y el Programa Mundial de Alimentos dice que más de 20 millones de vidas están en peligro en los próximos seis meses.
"El tiempo está acabándose para más de un millón de niños", dijo el director ejecutivo de UNICEF, Anthony Lake, en un comunicado.
"Aún podemos salvar muchas vidas. La severa malnutrición y la creciente hambruna se deben en gran medida a la mano del hombre. Nuestra común humanidad demanda actuar más rápido. No podemos repetir la tragedia de la hambruna de 2011 en el cuerno de África", añadió.
La hambruna fue declarada formalmente el lunes en partes de Sudán del Sur, que atraviesa una guerra civil desde 2013. El conflicto ha incrementado la división del país en líneas étnicas, llevando a Naciones Unidas a advertir de un potencial genocidio.
UNICEF dijo que 270.000 niños de Sudán del Sur estaban severamente malnutridos. La organización Save the Children, dijo el lunes que más de un millón de niños en Sudán del Sur estaban en peligro de morir de hambre.
Sudán del Sur también ha sufrido la misma sequía del este de África que ha llevado a Somalia al borde de la hambruna, seis años después de que 260.000 personas murieran por esta causa en 2011.
UNICEF dijo que se esperaba que 185.000 niños sufrieran malnutrición severa en Somalia este año, pero la cifra se podría incrementar a 270.000 en los próximos meses.
Otros 462.000 niños sufrieron de malnutrición aguda severa en Yemen, donde dos años de guerra han causado el derrumbe económico del país y severas restricciones de los envíos.
El hambre ha golpeado desde el año pasado partes del noreste de Nigeria, donde el Gobierno combate al grupo miliciano Boko Haram. La cifra de niños con malnutrición aguda severa se espera que alcance los 450.000 este año, dijo UNICEF.