Familiares, amigos y pobladores de la comunidad Ajuixes Cerro Alto, municipio de San Juan Sacatepéquez en Guatemala, se encuentran consternados por el asesinato de dos niños.
Son muchas las palabras positivas que en la comunidad dicen de los menores, todos los conocían por su perseverancia y dedicación al estudio y su familia.
Óscar Armando Top Cotzajay, de 11 años, y Carlos Daniel Xiquin, 10, eran estudiantes de tercero y cuarto primaria en la escuela de su comunidad, Ajuixes Cerro Alto, San Juan Sacatepéquez. Los menores fueron secuestrados el viernes por personas que conducían un automóvil negro, cuando los niños caminaban al centro escolar.
Vecinos encontraron los cuerpos entre costales en un camino que de San Juan Sacatepéquez comunica con San Raymundo.
Los vecinos, familiares y amigos, repudian la violencia contra los niños y aseguran que es un lugar tranquilo donde ese tipo de violencia no había ocurrido.
Toda la comunidad está de luto, las familias de Óscar y Carlos siguen sin creer lo que le ocurrió a sus hijos, y le piden a Dios “que se encargue de los que hicieron el daño”.
Óscar era muy religioso y participaba constantemente en actividades de la iglesia, le gustaba participar en clase y apoyar a sus compañeros. Mientras que Carlos era tranquilo y reservado, aunque aplicado en sus estudios, constante y responsable. Siempre apoyaba a su familia.
Los compañeros de los menores se reunieron esta mañana en la escuela y con fotografías y arreglos florales, recordaron los momentos que compartían en su etapa escolar.
Cuando localizaron los cuerpos, los padres afirmaron que les habían indicado que personas en un carro negro se los habían llevado. “Les ofrecieron jalón a la escuela”, comentaron.
Las familias aseguran que en su momento no denunciaron a la policía por miedo a represalias contra ellos y sus hijos.
Los niños serán sepultados el martes a las 13 horas en el cementerio local. Tendrán un homenaje en la escuela y servicios religiosos.
Maximiliano Xiquin, padre de Carlos, afirmó que tiene miedo porque no saben de dónde llegó el secuestro. El aseguró que su trabajo es cuidar una granja, y no tiene solvencia económica como para ser víctima de la delincuencia.
Francisco Rivas Lara, ministro de Gobernación, calificó de “lamentable” y “muy violento” el crimen en contra los dos niños.
Aseguró que desde el domingo hay un equipo “compenetrado” para lograr esclarecer ese hecho. Aun no hay hipótesis de qué fue lo que motivo el crimen, añadió.
Las acciones inmediatas para San Juan Sacatepéquez, donde ocurrió el incidente, fue mejorar e incrementar la presencia de la policía y adicionalmente el equipo de investigación que ya está trabajando, explicó el ministro.
Fuente: Prensalibre.com