Cuando la gente habla de El Granadino, rápidamente se trasladan al barrio Monseñor Lezcano en Managua. Este es un sitio donde se venden todos los productos derivados de cerdo; y por naturaleza que a los nicas las encantan los platillos del cerdo.
Hace casi medio siglo nació El Granadino y esta es su historia.
«Mi papá es granadino, originario de Granada, y vino a Managua cuando era joven, comenzó a ser taxista, busero y aquí se estableció en este lugar en Monseñor Lezcano con una pulpería. En este mismo sitio aquí comenzaron hacer nacatamales»; contó Elvin Chévez, propietario de El Granadino, próspero negocio dedicado exclusivamente a la venta de los derivados del cerdo.
«Me contaba mi papá que iban al mercado a comprar un cerdito en un carretón, y lo traían y lo sacrificaban aquí. Y así comenzó este punto de referencia de Managua. En el caso de mi mamá murió cuando yo tenía 16 años de edad y nosotros quedamos totalmente al frente del negocio»; agregó.
Un negocio familiar
De esta forma, en este establecimiento se venden los ricos fritos, chicharrón, moronga y la llamada pepena.
«Tenemos los chicharrones, tenemos la manteca que es uno de los rubros que se usa, se usa en los nacatamales, fritos y toda una variedad. Hay un frito que le llamamos pepena de fritos, es una idea viejana (del municipio de El Viejo en el departamento de Chinandega), eso se saca de los chicharrones; se le quita la grasa con carne y se fríe»; explicó Chévez.
Es tanto su éxito que han abierto dos locales más, por lo que dan gracias a Dios por las oportunidades que les ha dado en crecer como empresa.
«Los otros lugares están ubicados en la Centroamérica (Colonia) del parque Los Marañones, una cuadra al sur y estamos en Veracruz del kilómetro 14, carretera a Masaya, mil metros al norte»; especificó Chévez.
Satisfacción de clientes en El Granadino
Con El Granadino, los clientes están satisfechos con el producto que ofrecen. Además, afirman que los fritos y chicharrón son una delicia que nadie debe de desperdiciar.
«Y aquí venimos a comprar chicharrón, frito y si hasta gallopinto (arroz y frijoles fritos) hay de todo aquí»; dijo Roger Antonio Flores Herrera, uno de los tantos clientes que visita el negocio El Granadino.
“A mí siempre me ha gustado, el sabor es riquísimo y generalmente cuando vengo compro pepena de frito, frito o chicharrón. Aquí venís y compras el chorizo criollo que lo puedes cocinar con huevitos y venden el chicharrón que es extra carnudo que es delicioso”; dijo Marcel Martínez, otro de los clientes en El Granadino.
El negocio genera empleos
“Nosotros somos como 15 personas, en el área de despacho y en otras áreas somos como 10 personas más”; dijo por su parte Doña Ángela María Midence, una de las trabajadoras que lleva más tiempo laborando en El Granadino.
“Generamos empleo, pagamos seguro, pagamos todo lo que tiene que ver con los empleados, comemos aquí; ellos comen aquí, y comen lo que quieren”; expresó el propietario.
Y como todo negocio, cuentan con sus redes sociales donde los pueden contactar. El negocio El Granadino está ubicado en el barrio Monseñor Lezcano, de la Estatua de Monseñor Lezcano, 3 cuadras al Lago, 10 varas abajo y está abierto de lunes a viernes de 6:00 am a 3:30 de la tarde.