Conscientes de que esta lucha anti epidémica es de todos, los pobladores de la Colonia Leonel Rugama, en Managua, cooperaron con los brigadistas del Ministerio de Salud para eliminar los zancudos que transmiten el dengue, zika y chikungunya.
La fumigación es parte de las acciones sanitarias que día a día emprenden las autoridades de salud, en aras de contener los contagios de esa enfermedad que mata si no se acude a tiempo a los centros y hospitales.
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"Yo creo que como ciudadanos nicaragüenses debemos estar conscientes de que nosotros jugamos un papel muy importante cooperando con la comunidad y también con el MINSA. Cuando vienen a fumigar, abrir las puertas, ser de una manera responsable para que puedan entrar y fumiguen", mencionó Miguel Saavedra, poblador.
"Dentro de los lavaderos no debe haber nada acumulado, donde hay basura que fumiguen, no hay que tener nada de basura, de recipientes que contengan agua porque eso crea que la proliferación de los zancudoszancudos, para que estemos sanos, necesitamos mantener esa sanidad", agregó el ciudadano.
Recomendaciones para la salud
Las recomendaciones son las mismas, pero el énfasis es que más nicaragüenses tengan conciencia de que la prevención es la mejor estrategia médica para eliminar la proliferación de los mosquitos.
"Se están fumigando más de 300 viviendas, el objetivo de la fumigación es eliminar el zancudo adulto, recomendamos que la población se integre a la campaña de lo que es detectar todo criadero. Estamos en el invierno y recomendamos que limpien todos los canales del techo, las canaletas, que examinen el patio diario para detectar que cualquier utensilio que contenga agua y eliminarlo", dijo Edgard Pérez del Centro de Salud Francisco Buitrago.
"Aunque se fumigue cada 8 días o 15 días es importante que la población se integre a las medidas preventivas, para que logremos que no haya un impacto negativo. Hay que destruir todo criadero, con un cepillo limpien las piletas dos o tres veces por semana, las botellas con el pico hacia abajo", afirmó Pérez.
En la región centroamericana, Nicaragua es un ejemplo a seguir porque el modelo de salud familiar y comunitaria ha resultado positivo en la contención de esta y otras enfermedades.