Cada día son más familias de Managua las protagonistas de una transformación social de vida, al recibir la vivienda solidaria que construye el Gobierno con la cooperación de China-Taiwán.
Tras cuatro años de haber muerto su hija, y hacerse cargo de sus dos nietas más otros dos nietos que dejó su otro hijo, de quien no sabe su procedencia; existe una abuela ejemplar, Doña Lucía, que ahora podrá dejar un mejor porvenir a sus hijos de crianza.
«Le doy muchísimas gracias a Dios porque él fue el que el tocó verdad los corazones. Muchisimas gracias al Señor, porque la palabra del Señor dice en Salmos 27:10, ‘aunque mi padre, mi madre me dejare, con todo Jehová y recogerá en los momentos difíciles, Él ha estado conmigo’. Y le doy gracias a Dios verdad primeramente, después al comandante Daniel Ortega, aunque han pasado muchas cosas verdad pero, el comandante, es el hombre que se ha parado al frente para ayudar a los pobres, darles una vivienda digna, darle un techo, darle un terreno, donde puedan construir una vivienda y por eso yo le doy gracias a él, a la compañera Rosario Murillo», mencionó la protagonista.
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La anterior vivienda de Lucía López se sumaba a la lista de las familias que durante el invierno eran afectadas grandemente por la acumulación de agua.
Ahora, ya su panorama es otro y puede gozar de paz y tranquilidad al habitar en una vivienda totalmente nueva, producto de esa hermandad permanente entre Nicaragua y China Taiwán.
Más de 100 casas se han entregado en Managua, solo en Ciudadela Nicaragua ya son nueve en donde también hay más del 50% de calles rehabilitadas.
