Familias disfrutan del verano desde la comodidad de sus hogares

managua

En la comodidad de sus hogares miles de familias capitalinas disfrutaron este Jueves Santo la temporada de verano dándose un refrescante chapuzón en las ya populares piscinas inflables instaladas en las calles, el porche o el patio de sus casas.

No faltaba la buena música de verano, los bailes, la unidad familiar, la tranquilidad y armonía, pero sobretodo garantizar la seguridad de los mimados del hogar.

En el populoso barrio Monseñor Lezcano de Managua, Eduardo López, decidió esta Semana Santa pasarla junto a su familia en su hogar.

“Vos sabes que es peligroso hermano la calle, aquí los tenés más cerca a los chavalos, los cuidamos mejor que en la playa. Además muchos accidentes, la gente anda ebria, así que decidimos quedarnos en la casa”, expresó López.  

Gema Hunter, otra habitante de Monseñor Lezcano, manifestó que compró mejor una piscina porque le resulta más económico que estar pagando por toda su familia para ir a un paseo al mar.

 

“Creo que aparte de ser más económico pues es más seguro, así estamos pendientes de los niños, prevenimos algún accidente en la carretera e incluso estamos al cuido de nuestras casas que no se nos metan a robar”, expresó con una sonrisa la mujer de origen costeña.

 

“Nosotros en Semana Santa no salimos de la casa, es momento para meditar y reflexionar sobre la Pasión y Muerte de nuestro Señor Jesucristo, así que en casita disfrutamos en tranquilidad y amor respetando la Semana Santa”, dijo Mercedes Ortega.

Además de la música de verano, comidas y bebidas, las familias también degustaron del tradicional almíbar con pinol, propio de las costumbres y tradiciones de la Semana Santa en Nicaragua. 

“Nos preparamos con tiempo, se compra el dulce, los mangos, jocotes, papaya, grosea, coco, entre otros ingredientes, para después elaborar este dulce tradicional que repartimos entre la familia y vecinos”, manifestó doña Rosa Canales.

Estas fechas sirven para la recreación y la unidad familiar, pero también es momento para meditar en el ámbito religioso.