Mas de 2 mil habitantes del barrio 22 de Enero y de parte de la Colonia Centroamérica amanecieron sin agua potable ni energía, pues la noche de este miércoles las llamadas protestas pacíficas quemaron y tumbaron un árbol de la vida en el sector de la Jean Paul Genie.
“Rotundamente lo rechazamos como pobladores, como habitantes de nuestro barrio rechazamos estas actitudes que han tomado estos jóvenes que dicen ser estudiantes”, dijo la señora Marina Hernández.
“Aquí en el barrio 22 de Enero hay muchos niños que no fueron a clases por el motivo de que no hay agua, no pueden mandarse sin bañar a la escuela”, expresó la señora Cándida Orozco.
“Nosotros les dijimos que no lo cortaran por el agua, por la luz, y teníamos miedo porque nos podía caer en la casa a cada uno”, narró por su parte la joven Margarita Sequeira.
Te puede interesar: Conferencia Episcopal de Nicaragua informa sobre avances en el diálogo nacional
Esta acción además de dejar sin los servicios básicos a la población, puso en riesgo a varias familias por el fuego y los cables de alta tensión que cayeron cerca de viviendas y negocios.
“Eso perjudicó una casa de aquí, una vulcanización y habían niños, no miraron el peligro que hay, ahí hay niños”, destacó la señora Lourdes Campos.
“Las familias ya queremos la paz, no queremos más inestabilidad, aquí ya es vandalismo, esto ya se convirtió en otra cosa”, comentó la señora Brenda Rocha.
Las familias destacan que todos tienen derecho a protestar, pero no es dañando la propiedad publica y privada que se construye la paz y estabilidad en el país.
“Ya no estamos tranquilos en nuestras casas porque esos no son estudiantes, son vándalos que andan fregando y destruyendo porque ahorita dejaron a un poco de gente sin agua y sin luz”, valoró la señora Carolina Sánchez.
“Queremos vivir tranquilos en paz, a como estábamos, sin estar pensando en que vino un balazo por aquí que le pudo dar a alguien”, fueron las palabras ante esta situación de Miriam López.
Es por ello que la población rechaza que las llamadas protestas pacíficas se sigan desarrollando en esa zona de Managua, pues aseguran que en las mismas son lanzados de forma irresponsable morteros y hasta detonaciones lo que les llena de temor y pone en riesgo sobre todo a los más pequeños.
“Están creando inestabilidad, de otros lados vienen a crear zozobra para que digan que son los de aquí, pero no son los muchachos de estos lados”, dijo Lorna Cortez.
“El diálogo es importante para eso, no es necesario desbaratar una ciudad, desbaratar un país por un simple capricho que bien se puede resolver dialogando”, puntualizó la señora Claudia Ramírez.
Las cuadrillas de la empresa distribuidora de electricidad ya trabajaban para restablecer la energía y con ello la normalidad a una zona que rechaza seguir viviendo en zozobra producto de las mal llamadas protestas pacíficas.
