Vinícius regresará a Valencia en la primera visita del Real Madrid al estadio Mestalla desde que fue objeto de insultos racistas de la afición local la pasada temporada.
Los ataques estuvieron entre los peores que el delantero brasileño ha sufrido desde que llegó a España, y los mismos generaron un respaldo generalizado hacia Vinícius. También propiciaron que los dirigentes del fútbol español tomasen acciones, a pesar de que los insultos persisten.
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Vinícius llegó a las lágrimas durante ese partido en mayo del año pasado, después de que se encaró con un sector de la afición del Valencia que lo llamó mono y le hizo gestos de mono. Luego de que inicialmente se rehusó a seguir jugando, decidió volver y posteriormente prometió que no se dejaría amilanar.
“El campeonato que alguna vez fue de Ronaldinho, Ronaldo, Cristiano y Messi, hoy es de los racistas”, dijo Vinicius en ese momento. “Soy fuerte y llegaré hasta el final contra los racistas. Aunque sea lejos de aquí”.
Debido al abuso contra Vinicius — y sus duras palabras asegurando que no habían hecho suficiente— la Federación Española de Fútbol aplicó una multa de 45.000 euros (48.700 dólares) al Valencia y ordenó el cierre parcial del estadio por cinco encuentros. Valencia vetó de por vida a los tres seguidores que fueron arrestados por los insultos racistas.
El jueves, la policía española reportó que detuvo a un hincha del Atlético de Madrid que supuestamente amenazó y lanzó insultos racistas contra una niña de ocho años.