Una revisión total del calendario de fútbol que incluyera una Copa Mundial cada dos años beneficiaría más a los jugadores sudamericanos que a los europeos; afirmó el domingo el presidente de la FIFA Gianni Infantino.
Infantino promovió su plan de un Mundial bienal en Chile, la más reciente etapa de su gira sudamericana que incluyó visitas en Colombia, Venezuela y Ecuador.
“Estamos hablando no sólo de una cuestión de un Mundial cada dos años, sino de una revisión del calendario internacional en su totalidad”, dijo Infantino en una rueda de prensa.
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El máximo jerarca de la entidad rectora del fútbol tras reunirse con el presidente de la federación citó las propuestas de expertos; que plantean un nuevo calendario masculino y femenino, resaltando que todo está en fase de consulta.
Refiriéndose a los largos viajes para cumplir con sus selecciones, Infantino afirmó que el actual calendario internacional “es más negativo para los sudamericanos que para los europeos”.
“Hoy un jugador sudamericano, en un plazo de cuatro años, viaja entre 350.000 y 400.000 kilómetros”, señaló. En cambio, un jugador europeo en el mismo plazo, se desplaza si acaso 50.000 kilómetros.
Según Infantino, los largos viajes — con efectos de cambio de clima y jet lag — acaban mermando la condición física de los jugadores al final de la temporada; algo que también repercute al tocarles competir en un Mundial.
Infantino dijo que la FIFA tiene como responsabilidad es que los futbolistas puedan jugar en las mejores condiciones; “de igualdad también en el mundo sin dar ventajas a unos y desventajas a otros”.
Sudamérica y Europa no aprueban mundial cada dos años
Europa y Sudamérica, los dos bastiones tradicionales del Mundial, se han manifestado en contra de la propuesta, advirtiendo un posible boicot si la FIFA insiste con el plan.
Según la UEFA, la entidad rectora del fútbol europeo, un mundial cada dos años podría “diluir el valor” del torneo; y obligaría a los jugadores a participar en torneos altamente competitivos con mayor frecuencia, con el desgaste que ello conlleva y reduciendo el tiempo de recuperación.
Para Infantino, los cambios tendrían en cuenta imponer unas vacaciones obligatorias de tres semanas para que los jugadores que participan en un Mundial puedan descansar. Además, afirmó que la mayor frecuencia de los mundiales no perjudicaría a torneos continentales, como la Copa América, sino al contrario.
“Esto no impactaría absolutamente a la Copa América, al contrario, creo que la impactaría positivamente”, porque los que participan en el fútbol y en las competiciones se benefician “cuánto más fútbol de alto nivel hay”, dijo.
Infantino se reunió el domingo con el presidente de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional de Chile, Pablo Milad.
Tras pasar por Chile, donde permanecerá menos de 24 horas y donde dio el puntapié inicial a un partido de la categoría Sub 21 que enfrentó a los clubes regionales O’Higgins y Deportes Santa Cruz, Infantino viajará a Argentina donde está prevista su llegada el domingo en la noche.
