"Fue un golpe muy duro. Jamás imaginé pasar por una situación así", dijo Ronaldinho Gaúcho desde su prisión-hotel en Asunción, mientras aguarda la decisión del juez ante un pedido de libertad condicional por el escándalo de los pasaportes adulterados.
"Me quedé totalmente sorprendido al saber que los documentos no eran legales", expresó el ex Barcelona y ex Paris Saint-Germain al diario Abc de Asunción, en su primera entrevista concedida a un medio de prensa desde su detención el 6 de marzo, publicada el domingo.
Ronaldinho y su hermano Roberto de Assis Moreira están acusados de uso de documento paraguayo auténtico de contenido falso que la justicia local penaliza con hasta cinco años de prisión o multa.
Ambos exhibieron los pasaportes paraguayos al ingresar al aeropuerto internacional de Asunción el 4 de marzo, documentos que les fueron proporcionados por los promotores de su venida a Paraguay.
Ronaldinho pagó 1.600.000 dólares como garantía para que el juez decrete su prisión domiciliaria y la de su hermano, en este caso en un hotel céntrico de la capital paraguaya, donde se aloja desde el 6 de abril y por la que paga 700 dólares diarios por ambos.
En libertad lo antes posible
El ex ídolo del fútbol dijo que espera recuperar su libertad "lo antes posible" en base "a todo lo que aportamos en el caso", tras reafirmar que su intención siempre fue colaborar con la pesquisa judicial.
La investigación ya arrojó 16 detenidos, en su mayoría policías y funcionarios, más tres brasileños, incluidos un empresario y los hermanos De Assis Moreira, y provocó la renuncia del director de Migraciones.
'Dinho' explicó que había llegado el 4 de marzo a Asunción para cumplir un contrato gestionado por su hermano Roberto, que funge de representante.
"En este caso vinimos para participar del lanzamiento de un casino online y para el lanzamiento del libro autobiográfico 'Un crack de la vida' con la empresa que tiene los derechos de explotación en Paraguay", manifestó el Balón de Oro 2005.
Al reiterar sorpresa por su situación personal, aseguró que su intención "toda la vida fue llevar alegría a la gente con mi fútbol".
Recordó que tenía previsto retornar el 7 de marzo a Brasil para festejar el cumpleaños de su hijo. "Sobre lo que pasó después (que derivó en su detención) ya no sé".
Preso con una treintena de policías
El 6 de marzo, Ronaldinho y su hermano fueron detenidos en la Agrupación Especializada de la Policía, alojado con una treintena de policías condenados por delitos penales y políticos procesados por corrupción.
Ellos "me recibieron con amabilidad: jugué al fútbol, firmé autógrafos, hice fotos. No había motivo para no hacerlo con personas que estaban viviendo un momento difícil, igual que yo".
Dijo que lo primero que hará al abandonar Paraguay será encontrar a su madre. "Lo primero que haré será dar un beso grande a mi madre" y luego "absorber el impacto que esta situación ha generado".
Los abogados del deportista brasileño gestionan obtener la libertad condicional tras la reanudación de la actividad judicial el 4 de mayo, suspendida en prevención de la pandemia del Covid-19.