Juventus se atascó el sábado con un inesperado empate 1-1 de visita a Lecce, un partido que deparó otra nota negativa para Matthijs de Ligt en su primera temporada en la Serie A.
De Light ha sido el culpable en varios goles encajados por la Juve tras el desembolso de 75 millones de euros (85 millones de dólares) al Ajax en el mercado de verano. El zaguero holandés de 20 años cometió la falta para el penal con el que Lecce logró el empate.
“Me pareció que el movimiento de su brazo fue normal”, dijo el técnico de Juventus Maurizio Sarri. “Pero con las nuevas reglas es casi que imposible para un defensor evitar ciertas cosas”.
El delantero argentino Paulo Dybala convirtió un penal para darle la ventaja a Juventus.
Juventus se mantuvo en la cima de la liga, un punto por encima del Inter de Milán, que igualó 2-2 en casa ante Parma.
Con Cristiano Ronaldo recibiendo descanso, Juventus pasó dificultades para generar situaciones de peligro. El atacante argentino Gonzalo Higuaín gritó gol a los 15 minutos, pero se lo anularon por posición adelantada.
Tras reclamar un par de penales en el primer tiempo, los visitantes finalmente ejecutaron desde los 12 pasos por la falta del zaguero Jacopo Petriccione sobre Miralem Pjanic.
Dybala clavó el balón en el ángulo inferior derecha, dándole la ventaja a Juventus a los 55.
Sin embargo, Lecce igualó seis minutos después por la misma vía. Marco Mancosu facturó el penal tras una mano de De Ligt.
Higuaín acabó el partido con la cabeza vendada tras un choque con Gabriel, el portero de Lecce, que le dejó sangrando en la frente.
La Juve había agotado sus tres cambios, por lo que Higuaín siguió en cancha. El argentino fue sacado en camilla tras el silbatazo final y trasladado a un hospital para ser examinado.
Lecce quedó dos puntos por encima de la zona de descenso.