El Celta aprovechó el duelo contra los suplentes del Barcelona y dio un paso enorme para asegurar la permanencia en la Liga española al vencer el sábado 2-0 al flamante campeón.
En una de las pocas ocasiones de gol, el delantero uruguayo Maxi Gómez adelantó al conjunto gallego cuando a los 67 minutos se barrió para rematar un centro que se anidó a un lado del poste. El también atacante Iago Aspas selló la victoria para los anfitriones con un tanto de penal a los 88.
El triunfo dejó al Celta en el 14to lugar, cinco puntos por encima de la zona de descenso.
A falta de dos partidos en la temporada, el técnico de Celta Fran Escribá se mostró optimista con asegurar la salvación: “Vamos a esperar cómo acaba la semana, a ver los resultados de mañana que nos afectan directamente pero es cierto que nos deja muy cerca”.
Con la cabeza puesta en el partido contra Liverpool por las semifinales de la Liga de Campeones, el Barça optó por dar descanso a sus titulares y sufrió apenas la tercera derrota en el torneo doméstico — la primera después de 23 jornadas.
El primer tanto de Gómez llegó poco después de que a los anfitriones les habían anulado un tanto del zaguero mexicano Néstor Araujo, por posición adelantada, luego de la intervención del videoarbitraje a los 52 minutos.
El VAR volvió a aparecer cuando el árbitro José María Sánchez revisó una jugada en la que el balón le dio en la mano al defensa francés Samuel Umtiti y decretó el penal a favor del Celta, que Aspas cobró magistralmente para cuajar la victoria ante sus aficionados.
Con Lionel Messi, Luis Suárez y otros titulares descartados, el Barça mandó como titular a Ousmane Dembélé. Pero el extremo francés apenas jugó tres minutos antes de salir por una molestia muscular.
“La peor noticia es esto, las lesiones. Veníamos aquí con la intención de no hacernos daño y hacer una buena actuación”, dijo al concluir el juego el mediocampista azulgrana Carles Aleñá. “Ahora hay que seguir adelante y a pensar en lo que viene, que es lo más importante”.
