Mark David Chapman, el hombre que asesinó a John Lennon hace casi 36 años, continuará recluido en una prisión de máxima seguridad en el condado de Erie después de que su petición de libertad condicional fuera rechazada por novena vez desde el año 2000.
Chapman, de 61 años, no ha logrado convencer a la junta estatal que podría darle la libertad condicional, por lo que continuará con su reclusión.
Seguidor obsesionado con Lennon, Chapman fue declarado culpable por disparar contra el músico cuando llegaba con su esposa, Yoko Ono, al edificio donde residía en diciembre de 1980.
Chapman fue condenado a una pena de 20 años a cadena perpetua después de declararse culpable de asesinato en segundo grado. Su solicitud de libertad condicional se ha producido cada dos años desde 2000.
«Pese a que existen varios factores favorables, encontramos que todo eso se contrarresta con el fin premeditado y de búsqueda de fama del crimen«, indicaron en un comunicado la Junta de Libertad Condicional de Nueva York.
«A partir de nuestra entrevista y de la revisión de sus registros, nos encontramos con que su libertad sería incompatible con el bienestar de la sociedad y por lo tanto despreciaría la seriedad del crimen», concluye le comunicado.