Una profesora de 22 años y un niño de cinco años, son las dos víctimas mortales que dejó al sur de Turquía, cinco cohetes disparados desde Siria.
De la misma manera, detallaron que otras seis han resultado heridas durante el ataque desde Siria. Así mismo, el Gobierno turco responsabilizó a la milicia kurda Unidades de Protección Popular (YPG).
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«Los terroristas del YPG/PKK dispararon cinco cohetes desde el norte de Siria, que mataron a dos personas e hirieron a otras seis en la provincia turca de Gaziantep»; informó la agencia oficialista Anadolu, citando a Davut Gül, gobernador de esa región.
Por lo tanto, los medios informan de que los proyectiles impactaron en un centro escolar y dos viviendas en la localidad fronteriza de Karkamis, y en un vehículo situado junto al paso con Siria.
Varios heridos tras el ataque con cohetes en Turquía
Según la oficina del gobernador, también especificó que dos de los heridos se encuentran en grave estado.
La artillería turca ha respondido bombardeando los puntos desde los que se lanzaron los cohete; según las autoridades, pero sin especificar cuáles son.
Karkamis, en la orilla derecha del Éufrates, se halla unos 30 kilómetros al norte de Manbech, zona bajo control de las YPG. Y a la misma distancia de la ciudad kurdosiria de Kobani; pero las posiciones del YPG llegan hasta la propia ribera izquierda del Éufrates.
Precisamente esta zona, en concreto el área de Zor Magar, bombardeada en la tarde del domingo por cazas turcos en represalia por el ataque a Karkamis, asegura el diario turco Hürriyet.
La prensa de Turquía ha presentado la campaña de bombardeos, que se extiende también a Irak, como una represalia por al atentado terrorista que el pasado día 13 causó seis muertos en Estambul y que Ankara atribuye al YPG.
«Ha llegado la hora del ajuste de cuentas», aseguró el Ministerio turco de Defensa en Twitter a primera hora del domingo, junto a una foto de un avión militar despegando. Y añadió que los que han perpetrado los «ataques traicioneros» rendirán cuentas.