Mediante una conferencia de prensa, el presidente de Türkiye, Recep Tayyip Erdoga, criticó la respuesta de la Unión Europea (UE) contra Rusia tras su operación militar especial en Ucrania.
Y señaló que la subordinación del bloque comunitario a la política de sanciones de Estados Unidos ha provocado la actual crisis del gas en la región.
Durante visita oficial a Bosnia y Herzegovina, el jefe de Estado subrayó que esa crisis energética es consecuencia de hacer frente a Moscú.
Expresó que “Europa recoge lo que ha sembrado” y que las medidas restrictivas unilaterales impuestas llevaron al presidente ruso, Vladímir Putin, a adoptar contramedidas, entre ellas revisar su política de venta de gas a la UE.
Türkiye asegura que Europa va a pasar este invierno con serios problemas
Valoró: “(Nosotros) no tenemos ningún problema con el gas natural (…) Creo que Europa va a pasar este invierno con serios problemas”.
Por lo tanto, este lunes, el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, confirmó que no se reanudará el suministro de gas a Europa a través del gasoducto Nord Stream debido a las sanciones que Occidente le ha impuesto al Estado y a empresas rusas.
Así mismo, Peskov explicó que las sanciones generan un desorden jurídico y práctico absoluto en todo lo relacionado con el servicio técnico de los equipos e instalaciones; por lo que devienen causa principal de los problemas con el bombeo de gas.
El Gobierno de Türkiye defendió la integridad territorial de Ucrania. Y desde el primer momento se opuso al operativo militar especial de Moscú; para proteger a la población del Donbás y desnazificar-desmilitarizar Ucrania.
Presiones económicas, políticas y diplomáticas
Sin embargo, no suscribió la política de presiones económicas, políticas y diplomáticas de Occidente e incluso actuó como mediador entre Moscú y Kiev; con los que mantiene buenas relaciones.
Además, Erdogan anunció a inicios de agosto, durante una visita a Rusia; que pagará en rublos una parte de sus importaciones de gas provenientes de este país.
Medios internacionales señalan que, por otro lado, Rusia proporcionó liquidez en divisas extranjeras a Türkiye; al transferir miles de millones de dólares para construir una central atómica en la costa mediterránea turca.