En Belfast, Irlanda, una madre compartió su desgarradora experiencia después de que su hija de 12 años fuera ingresada en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) debido a complicaciones graves relacionadas con el vapeo.
La historia de Mary Griffin y su hija Sarah arroja luz sobre los riesgos alarmantes que los vapeadores pueden representar, y su objetivo es concienciar, en especial a los jóvenes, sobre estos peligros potenciales.
La madre y la hija están hablando sobre sus experiencias en apoyo de una nueva campaña de concientización sobre el vapeo realizada por Chest Heart & Stroke de Irlanda del Norte (NICHS), en medio de preocupaciones sobre los conceptos erróneos que a menudo se asocian con el vapeo.
De acuerdo a lo que relató la madre de la menor, era un domingo por la noche cuando Sarah se estaba preparando para ir a dormir y dijo que no se sentía muy bien. Comenzó a toser, pero como Sarah tiene asma; lo atribuyeron al cambio de clima, ya que eso había sido un desencadenante del asma de Sarah antes.
Niña de 12 en coma por usar vapeadores en Irlanda
«Su tos no era diferente a la de cualquier otro momento y usó su inhalador y nebulizador desde el domingo por la noche hasta el lunes por la mañana».
“Esa mañana estaba llevando a mis otros dos hijos a la escuela cuando Sarah llamó y me dijo: ‘Vuelve mamá, no me siento bien, tengo miedo’. Llegué a casa, le volví a dar a Sarah su inhalador y nebulizador y pareció calmarse.
Momentos más tarde, Sarah volvió a toser, esta vez completamente sin aliento, apenas capaz de articular una frase, diciendo: ‘Necesito un médico o ir al hospital’”.
Su padre la llevó inmediatamente al Royal Victoria Hospital. La enfermera revisó los signos vitales de Sarah y sus niveles de oxígeno eran muy bajos. Cuando a madre llegó, la niña estaba con oxígeno y conectada a todo tipo de máquinas.
«Había personal médico a su alrededor evaluándola y le dijeron que necesitaba ir a la UCI porque se estaba deteriorando muy rápidamente”.
El médico le mostró una radiografía de los pulmones de Sarah y le explicó que uno de ellos había resultado gravemente herido. Por tanto, el otro trabajaba horas extras y agravaba su asma. El equipo médico trabajó con Sarah las 24 horas del día, pero fue un viaje difícil, como explica Mary.
