Una sofocante ola de calor asfixia y «chicarronea» el sur de España, con temperaturas que alcanzarán los 37ºC para el mes de abril.
«Durante el jueves 27 y el viernes 28 es muy probable que se dé el punto álgido de este episodio»; indicó la agencia meteorológica estatal (Aemet), según la cual este miércoles ya se batieron varios récords de temperaturas
La «masa de aire muy cálido y seco, de origen norteafricano, que provoca esta ola de calor, originó desde el comienzo de la semana un ascenso de las temperaturas; alcanzando valores propios del verano y excepcionalmente altos para las fechas», añade la agencia.
Situación catastrófica para la agricultura en España
Según Aemet, los termómetros podrían subir el jueves hasta los 32-34 grados en el sur del país, e incluso hasta 37 grados en el valle del río Guadalquivir; sin embargo, sus proyecciones a la baja después de haber previsto a comienzo de la semana que se podrían alcanzar los 40 grados.
Las temperaturas ya llegaron o superaron los 37 grados el miércoles en tres estaciones de las provincias de Sevilla y Huelva, en Andalucía (sur), según Aemet.
Por lo tanto, esta ola de calor llega a España en una primavera anormalmente cálida y seca, lo que supone una situación catastrófica para la agricultura, pilar de la economía española.
Pronóstico para esta semana y tendencia para la próxima (hilo 🧵)
➡️ Esta semana ya no se espera lluvia en cantidades significativas 🌞
➡️ Las temperaturas máximas se mantendrán notablemente más altas de lo normal para esta época; extraordinariamente más altas jueves y viernes 🌡️ pic.twitter.com/yJGHVgGFK9— AEMET (@AEMET_Esp) April 25, 2023
De acuerdo con el Coag, el principal sindicato de agricultores, el 60% de las tierras agrícolas españolas están actualmente «asfixiadas» por la falta de precipitaciones.
Frente a esta situación, el gobierno español pidió el martes a la Comisión Europea que active la «reserva de crisis» de la Política Agrícola Común (PAC) para ayudar a los agricultores, y anunció paralelamente ayudas fiscales.
País europeo en primera línea frente al cambio climático, con casi 75% de su territorio en vía de desertificación; según la ONU, 2022 fue el año más cálido jamás registrado en España, que vivió varias olas de calor desde el mes de mayo, según Aemet.