La prensa de Italia y responsables políticos denunciaron el jueves una pelea que se produjo entre diputados durante un tenso debate sobre el proyecto del gobierno de extrema derecha de Giorgia Meloni de conceder una autonomía a la carta a las regiones.
El texto prevé conceder a las regiones que lo deseen más autonomía respecto a Roma, lo que hace temer un retroceso en los servicios públicos en las regiones más pobres.
El miércoles por la noche, en pleno debate en el hemiciclo, el diputado del Movimiento 5 Estrellas (M5S), Leonardo Donno, se levantó de su asiento para acercarse al ministro de Asuntos Regionales y de Autonomía, Roberto Calderoli, miembro de la Liga, e intentó colocarle una bandera italiana alrededor del cuello.
Este gesto, que pretendía denunciar el debilitamiento de la unidad del país, provocó el enfado de los diputados de la Liga, el partido de ultraderecha de Matteo Salvini que abandonaron sus bancas y bajaron al hemiciclo para echarse encima de Donno.
Polémica en Italia tras una pelea entre diputados en el Parlamento
«Far West en la Cámara», tituló el diario la Stampa. «Estampida y golpes […]: la Cámara es un ring», titulaba por su parte el Corriere della Sera, principal diario del país.
«La derecha escuadrista lucha en el Parlamento», lamentó la Repubblica, que utilizó el término que designa a las fuerzas paramilitares de después de la Primera Guerra Mundial, convertidas en una forma de brazo armado del fascismo italiano.
Donno recibió dos golpes y tuvo que ser evacuado en silla de ruedas y trasladado al hospital. Las imágenes, en portada de los diarios y las cadenas de televisión, muestran una trifulca entre una veintena de hombres en traje y corbata.
El altercado provocó un torrente de reacciones.
Los diputados de la Liga y de Fratelli d’Italia (Hermanos de Italia; extrema derecha), el partido de Giorgia Meloni, acusaron a Donno de haber provocado el incidente e incluso de haber fingido sus heridas.
El M5S denunció una «agresión gravísima y vergonzosa» y reclamó «medidas serias e inmediatas».
«Se llega a la violencia desde las bancas de la mayoría Meloni […] No pasarán. Vergüenza», escribió en X su dirigente, Giuseppe Conte.
