Este año, la peregrinación anual del Hach en La Meca se ha visto empañada por una tragedia sin precedentes. Más de 1.000 peregrinos musulmanes perdieron la vida debido a las condiciones climáticas extremas que azotan Arabia Saudita.
El centro meteorológico saudita ha registrado temperaturas alarmantemente altas, alcanzando picos superiores a los 51,8 ºC cerca de la Gran Mezquita de La Meca.
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Esta ola de calor ha tenido consecuencias devastadoras, obligando a más de 2.000 peregrinos a buscar atención médica urgente; según fuentes oficiales sauditas reportadas el pasado 16 de junio.
La obligación del Hach, uno de los cinco pilares del Islam, atrae a millones de musulmanes de todo el mundo cada año a La Meca.
Calor extremo en Arabia Saudita
Sin embargo, este año ha sido especialmente duro, con informes de al menos 1.081 muertes confirmadas por más de diez países a través de comunicados oficiales y reportes de sus embajadas.
La comunidad internacional y los líderes religiosos están conmocionados por esta pérdida masiva de vidas durante un momento tan sagrado para los creyentes musulmanes.
Las autoridades de Arabia Saudita, han estado trabajando arduamente para proporcionar asistencia y cuidado a los afectados; pero la magnitud de la crisis plantea interrogantes sobre las medidas de seguridad y preparación para eventos climáticos extremos en futuras peregrinaciones.
A medida que la noticia se difunde, se espera que aumenten los llamados a una revisión exhaustiva de las políticas de seguridad y gestión de emergencias durante el Hach; con el objetivo de prevenir tragedias similares en el futuro.
