A 29 años de cárcel condenaron a un hombre de 30 años, persiguió y le cortó la garganta a una mujer, a plena luz del día en una calle de Londres; por la insólita razón que ella le puso fin a su relación.
Dennis Akpomedaye viajó más de 200 kilómetros y caminó durante varias cuadras para asesinar a sangre fría a la polaca Anna Jedrkowiak, quien solo tenía 21 años.
La escena quedó grabada en las cámaras de seguridad de la zona, muestran como Akpomedaye le clavó un cuchillo de cocina varias veces a Jedrkowiak; hasta dejar un charco de sangre, desgraciadamente ella no pudo sobrevivir el ataque y falleció en el lugar.
Por lo tanto, la policía de Londres calificó de mayor gravedad, es que Dennis Akpomedaye en realidad quería decapitarla, pero «por tiempo» le causó las letales heridas.
Brutal feminicidio en las calles de Londres
Así mismo añadieron que, el hombre se esperó hasta que la mujer estuviera en un callejón para apuñalarla sin parar en 40 ocasiones. La rabia de este hombre surgió tras la decisión de ella de terminar la relación.
Incluso le mandó un feroz mensaje amenazándola; pero esto no la pudo haber alertado de las malas intenciones de este sujeto.
Todo comenzó en las calles de Ealing, ubicado al oeste de Londres. Una vez que la mujer salió de su trabajo junto con su novio; ya que ambos laboraban en un restaurante, llegaron a un callejón donde sorpresivamente Dennis Akpomedaye se abalanzó sobre ella.
Inmediatamente, sacó un cuchillo de cocina con el que le perforó el estómago y le cortó la garganta; en lo que las autoridades describieron como un intento de decapitarla.
Cabe destacar que, los hechos ocurrieron en mayo del año pasado y la corte se tardó bastante en dictar una sentencia sobre este caso. El Tribunal de la Corona de Kingston escuchó, en defensa de Dennis Akpomedaye, que el homicida no pudo aceptar la ruptura entre él Anna Jedrkowiak.
Luego de esto, el hombre de 30 años le envió un terrorífico mensaje donde le aseguraba que estarían juntos «pase lo que pase… te encontraré».
Durante un tiempo, el sujeto confesó haberla acosado, cuando ella vivía en Newport, Gales del Sur. Hasta ese día donde esperó pacientemente a que terminara su jornada laboral y vestido con un pasamontañas y totalmente de negro la persiguió a ella y a su nuevo novio por las calles de Londres.