El parlamento europeo rechazó este viernes un intento de prohibir a las empresas etiquetar productos de origen vegetal con nombres como si fuesen de origen animal, por lo que se podrán usar términos como "hamburguesa vegetariana" o "salchicha vegana".
No obstante, los eurodiputados apoyaron una enmienda para prohibir el uso de términos como "queso" o "yogur" para productos alimenticios cremosos pero sin lácteos, cada vez más populares.
Según activistas ambientalistas, el debate sobre el intento del lobby de la carne de limitar el uso de términos como "bistec", "hamburguesa" o "salchicha" distrajo la atención sobre un proyecto de ley agrícola más amplio que, según ellos, perjudica el clima.
Pero los grupos ecologistas se congratularon de la victoria.
Controvèrsia a la UE per la #veggieburger:
El Parlament Europeu decideix aquesta setmana si dona suport a la prohibició de l'etiqueta "hamburguesa vegetariana" a la UE
Els ramaders ho demanen, però entitats mediambientals i algunes grans cadenes s'hi oposen@agenciaacn pic.twitter.com/cDQV9pTgDU
— Natàlia Segura (@nataliasegura_) October 19, 2020
"No nos sorprende, pero nos complace que los eurodiputados hayan rechazado los intentos cínicos de una industria cárnica proteccionista de obstaculizar la comercialización de proteínas de origen vegetal en la UE", dijo Joanna Swabe, de Humane Society International.
En su opinión, la afirmación de los productores de carne de que los consumidores "se confundirían" fue correctamente rechazada "como una tontería desproporcionada".
Decepción ante prohibición de los términos lácteos
Los mismos activistas, no obstante, no ocultaban su decepción ante la prohibición de los términos lácteos, aunque esa medida aún podría eliminarse del proyecto de ley cuando los negociadores del parlamento y los estados miembros de la UE finalicen el texto.
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"Es una vergüenza que el lobby de la agricultura industrial no se contente con acaparar miles de millones [de euros] en subsidios para la agricultura industrial destructiva", dijo Marco Contiero, director de política agrícola de Greenpeace Europa.
"Ahora están enturbiando el debate sobre la reforma agrícola con un voto inútil sobre los nombres de los alimentos", lamentó.
El grupo que reúne a los sindicatos agrícolas europeos, Copa Cogeca, había apoyado ambas prohibiciones, argumentando que los consumidores se confundirían.
Pero los grupos de consumidores y los ambientalistas ridiculizaron esta idea después de que la prensa informara que la prohibición se había agregado a un borrador del proyecto de ley de agricultura de la UE.
"Los consumidores no se confunden de ninguna manera con un filete de soja o una salchicha a base de garbanzos, siempre que el producto esté claramente etiquetado como vegetariano o vegano", argumentó Camille Perrin, del sindicato de consumidores BEUC.
El mercado de productos proteicos de origen vegetal se ha visto impulsado por la percepción de que son más saludables y dejan una menor huella medioambiental que las explotaciones ganaderas, grandes emisoras de CO2, informó AFP.