La Fiscalía española pide penas de prisión de entre 39 y 40 años para cada uno de los tres exjugadores del Arandina Club de Fútbol a los que acusa de cuatro delitos: un delito contra la libertad sexual, un delito continuado de agresión sexual y otros dos delitos de agresión sexual, todos ellos contra una menor de 15 años, informa Europa Press, que ha tenido acceso a documentos vinculados al caso. El total de las penas suma 118 años de cárcel.
Los hechos juzgados se produjeron en noviembre de 2017, cuando la menor acudió al domicilio que los tres hombres (de 19, 22 y 24 años en aquel momento) compartían en Aranda del Duero, al norte del país.
El Ministerio Público considera probado que los acusados mantenían contacto desde dos meses antes, sobre todo por WhatsApp, con la víctima, a quien conocían con anterioridad y cuya edad conocían, con el fin de convencerla para mantener relaciones sexuales con ella.
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Según la versión de la víctima, tuvo un encuentro sexual consentido con uno de los imputados, pero no con los otros dos, quienes la forzaron a mantener relaciones intimidándola con la complicidad del primero. Por su parte, los detenidos aseguraron desde el primer momento que siempre medió el consentimiento.
Orden de alejamiento
Los tres hombres ingresaron en prisión el 13 de diciembre de 2017, dos días después de ser detenidos, y permanecieron recluidos hasta marzo de 2018, cuando fueron puestos en libertad con cargos.
Ahora la Fiscalía pide para Raúl Calvo, al que considera autor de los delitos, una pena de 40 años de cárcel y la prohibición de acercarse a la víctima a menos de 1.000 metros durante 16 años, así como de comunicarse con ella por cualquier medio. Para Cuadrado y Rodríguez, a quienes considera "cooperadores necesarios", solicita un total de 39 años de prisión, además de la prohibición de acercarse y comunicarse con la víctima durante 26 años.
Asimismo, los tres encausados se enfrentan a la petición de 10 años de libertad vigilada y el pago de una indemnización para la víctima de 50.000 euros (unos 56.200 dólares), y 20.000 euros más (unos 22.500 dólares) para Raúl Calvo por el daño moral causado.