VARSOVIA, Polonia (AP) — El primer ministro de Polonia, Mateusz Morawiecki, prometió el martes castigos más severos para aquellas personas que abusen sexualmente de menores de edad, luego de que un nuevo documental sobre sacerdotes pedófilos impulsó al país a lidiar con el problema.
El documental “No se lo cuentes a nadie” ha conmocionado a esta sociedad profundamente católica de la nación desde que fue lanzado el sábado en YouTube.
Contiene testimonios desgarradores de hombres y mujeres que fueron manoseados y violados cuando eran niños y adolescentes por sacerdotes, un trauma que arruinó su niñez. Uno intentó quitarse la vida, otro se volvió anoréxico.
En la cinta, una mujer de 39 años, que fue abusada cuando tenía 7, relata que hasta la fecha tiene pesadillas y confronta a su atacante, quien ahora es un anciano, y que es captado por una cámara oculta mientras admite que había cometido un delito.
Te puede interesar: Austria entrega los primeros documentos para el tercer género
La conmoción por las acusaciones de abuso y de encubrimiento es un desafío para el gobierno de derecha de Polonia, que es cercano a la iglesia católica. Recientemente, el dirigente del partido gobernante, Jaroslaw Kaczynski, habló de un “ataque” a la iglesia por los esfuerzos anteriores para enfrentarla por su cultura de secretismo e impunidad.
El partido gobernante, Ley y Justicia, también ha tratado de exhibir al movimiento por los derechos para la comunidad LGBT como una amenaza para los jóvenes.
Morawiecki sostuvo una conferencia de prensa en Varsovia junto con el ministro de Justicia Zbigniew Ziobro para anunciar que el gobierno ha preparado un proyecto de ley para castigar de una forma más severa el abuso de menores.
Bajo la nueva propuesta, que todavía debe ser aprobada por el Parlamento, la sentencia máxima para dicho abuso aumentará de 25 a 30 años.
También puedes ver: Católicos mueren durante un ataque a una procesión en Burkina Faso
“Todo crimen degenerado, desagradable, cruel y bestial, sobre todo la pedofilia, será más estigmatizado de lo que es ahora”, declaró el primer ministro a la prensa.
En otra secuela del documental, las autoridades eclesiásticas cubrieron el mismo martes una estatua del fallecido papa Juan Pablo II con un sacerdote que, de acuerdo con la cinta, supuestamente cometió abusos.