Tiffany Moss (36), la mujer que, en 2013, mató su hijastra por inanición (extrema debilidad física provocada ante la falta de alimento), fue condenada a pena de muerte por un juzgado de Georgia (Reino Unido).
El grupo de magistrados detalló que Moss quemó el cuerpo de la menor de 13 años con la intención de desaparecerlo. La mujer se presentó a su juicio sin ningún rastro de remordimiento. Según detalla el diario del Reino Unido, Daily Mail, solo dijo que esperaba que “Dios la ayude”.
Su esposo, Eman Moss, el padre biológico de la pequeña asesinada, se encuentra recluido tras declararse culpable y ser condenado a cadena perpetua a cambio de testificar. La pena de muerte dictada contra Tiffany fue la primera que se dicta en Georgia en más de cinco años.
Te puede interesar: Mujeres contraen VIH al realizarse famoso "Facial de vampiro"
En el juicio, los fiscales demostraron que ella había encerrado a la niña en una habitación para matarla de hambre.
“Vivía sin comida ni agua y entre la basura de su propia cama porque se había debilitado demasiado al punto de no poder moverse”, detalló un médico forense. Cuando murió, la niña pesaba el mismo dígito de su edad: 13 kilos.
Después del asesinato por inanición, Tiffany y Eman Moss intentaron desaparecer el cuerpo: le prendieron fuego y lo lanzaron a un bote de basura. Sus otros dos hijos, cuyas edades no han sido reveladas, estaban con ellos cuando intentaban deshacerse del cuerpo, según el juzgado.
El fiscal de distrito de Gwinnett, Danny Porter, instó al jurado a elegir la pena de muerte para Tiffany, en lugar de la libertad condicional. “Ella ha mostrado mucha crueldad. Siempre habrá ese lado oscuro a la espera de salir”, consideró el magistrado.
Porter la describió como una "madrastra malvada" y cuando se dirigió a ella para preguntarle si quería decirle algo, solo respondió: "No".
El jurado de seis hombres y seis mujeres aceptó la sentencia de muerte luego de reanudar las deliberaciones a las 9.00 a.m. del martes.
Moss es ahora la única mujer en el corredor de la muerte de Georgia (Reino Unido), y se convertiría en la tercera en ser condenada a pena de muerte en la historia del estado.
