Un hombre de 27 años ha sido detenido en Italia por asesinar supuestamente a un joven de 33 en la ciudad de Turín sólo porque parecía "demasiado feliz", según ha confesado durante el interrogatorio. El suceso se produjo el pasado 23 de febrero, cuando Stefano Leo fue apuñalado mortalmente en el cuello, y el supuesto autor de los hechos, Said Machaouat, se entregó este domingo a los ‘carabinieri’.
Durante el interrogatorio posterior, el presunto homicida confesó que había elegido a Leo casualmente mientras paseaba por la ribera del río Po y justificó su elección en el "aire de felicidad" de la víctima.
El fiscal jefe de Turín, Paolo Borgna, califica el móvil del homicidio de "sorprendentemente banal" y, aunque aún debe verificarse el testimonio del acusado, destacó una frase de todo lo que ha reconocido a las autoridades tras entregarse: "Elegí a ese joven entre las muchas personas que pasaban porque parecía demasiado feliz, y no soportaba su felicidad".
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El comandante de los carabinieri, Francesco Rizzo, explicó que el asesino es italiano de origen marroquí y que llegó al país de niño. Pasaba por un mal momento personal: no tenía trabajo, dinero ni tampoco una vivienda, por lo que dormía en un albergue. Se había separado de su mujer en 2015 y, desde entonces, su caso se había seguido por los servicios sociales ya que tenía antecedentes por malos tratos en el ámbito familiar.
El comandante destacó que la investigación aún no se ha cerrado y que, por el momento, ya se ha asegurado la presencia del presunto homicida en la escena del crimen. Han sabido también que en los últimos meses había vivido temporalmente tanto en su país de origen como en la isla de Ibiza.
Según la transcripción del interrogatorio leída por un carabinieri, el acusado dijo textualmente que "quería asesinar a un chico como yo, quitarle todas las promesas que tenía, los hijos… arrebatárselo a sus amigos y a sus familiares".
