Caitlin McMichael no puede con el dolor, esa sombra feroz que la envuelve y la desorienta cada vez que recuerda cómo murió su pequeño Alfie Gildea, de tan solo 4 meses.
Su propio padre, Sam Gildea, lo golpeó y mató tras una sobredosis de cocaína y marihuana.
Alfie sufrió “lesiones catastróficas” cuando se quedó con su él en la casa familiar de Greater Manchester, un condado al noroeste de Inglaterra (Reino Unido).
Caitlin estaba en una consulta médica, el 12 de setiembre del año pasado, cuando su engreído era 'masacrado' por su progenitor. Dos días después, falleció por fuertes lesiones cerebrales.
Te puede interesar: Ex conejita detenida por la muerte de un doctor en California
“La idea de lo que él (Sam) le hizo a mi bebé tuvo un efecto catastrófico en mi vida. Alfie era un bebé muy feliz y contento. Era tan lindo y le encantaba ser abrazado. Hizo que mi corazón se derritiera. Su muerte me ha devastado”, contó ante un tribunal del Reino Unido. "Nunca veré crecer a mi hermoso niño”.
El fiscal Andrew Thomas QC, del Reino Unido, reveló hoy la naturaleza violenta y controladora del asesino, y le dijo al tribunal que con frecuencia acusaba a su compañero de haberlo engañado, que la había separado de sus amigos y que no valdría nada sin él.
Las muestras tomadas al hombre tras ser arrestado indicaron que había tomado grandes cantidades de cocaína y marihuana la noche anterior a la muerte de su hijo.
El tribunal también escuchó que el asesino sufrió de paranoia que lo llevó a escuchar voces en su cabeza y amenazó con apuñalar a un amigo.
Gildea tenía 20 condenas anteriores y había sido encarcelado por delitos como robos y de automovilismo. El juez Dove también aseguró que Gildea había sido un "hacker de drogas" y dijo que "no había duda" de que el consumo de cocaína y marihuana había tenido un papel determinante en la muerte de su hijo, Alfie.
Tras ello, fue encarcelado durante 13 años por homicidio y dos años adicionales por maltrato contra pareja. Cumplirá cuatro años adicionales con una licencia al final de su sentencia, en el Reino Unido.