Una cachorra fue encontrada afuera de la casa de sus dueños, tres días después de ser robada. Wilma, una bulldog británica de 12 semanas, había sido abandonada afuera de la casa familiar. Su cadáver pendía de un alambre.
Los malhechores también se llevaron un auto Mercerdes, el cual fue encontrado en una finca cercana. Gemma Knowles, de 31 años, y su compañero Andrew Bolland, de 36, intentaron revivir a la mascota boca a boca, pero sus esfuerzos fueron en vano. Desde hacía unos días, cuando lanzaron un comunicado a través de Facebook, la habían intentando ubicar sin éxito.
Los hijos de la pareja, Penélope, de 2, Josh, de 10, y Dominic, de 13, están tan conmocionados que ya no quieren vivir en su hogar. “Estamos absolutamente devastados. Solo habíamos tenido a Wilma durante tres semanas; la compramos porque los niños habían estado rogando durante años por un cachorro. Simplemente no puedo creer que alguien nos haga esto”, contó Knowles.
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Los ladrones irrumpieron en su casa, ubicada en Cranberry Lane, Darwen, una villa de Inglaterra, el pasado 19 de marzo, mientras ella se encontraba en su trabajo. Tras romper la puerta trasera, se robaron a la cachorra engreída, el auto y 40 euros en efectivo. Knowles, que es docente, cree que la perrita fue robada debido a su valor en la calle: casi 4 mil euros.
“No hay ninguna razón para que alguien nos haga esto: somos una familia tranquila, nos mantenemos para nosotros mismos de verdad. Creo que deben haber llevado al cachorro a vender por dinero en efectivo, pero luego se asustaron por la atención en Facebook", agregó.
La policía de Inglaterra fue llamada a la escena y se dice que está investigando el incidente. “Nuestros pensamientos están con los dueños de Wilma en este momento angustioso. Las consultas están en curso”, manifestó un portavoz policial.
