La tormenta "Leslie" golpeó Portugal la mañana de este domingo con vientos de hasta 176 km por hora, arrancando árboles y dejando a cientos de miles de hogares sin electricidad, pero fue perdiendo intensidad al alcanzar el norte de España.
El huracán, que erraba por el océano Atlántico desde el 23 de septiembre, se degradó a tormenta postropical en las primeras horas del domingo.
"Lo peor ya pasó. El fenómeno afectó sobre todo a las regiones del litoral centro y norte del país", declaró ante la prensa Luis Belo Costa, comandante de la Protección Civil portuguesa.
La tormenta dejó 28 heridos leves y unas sesenta personas tuvieron que ser realojadas, precisó el responsable, añadiendo que el distrito de Coimbra (centro) había sido el más afectado, por delante de las zonas de Leiria (centro), Aveiro (norte), Viseu (norte), Lisboa y Oporto (norte).
En total, los equipos de emergencia registraron más de 2.500 incidentes, en gran mayoría causados por los árboles arrancados, o por los tejados dañados por la fuerza del viento.
Unas 324.000 personas sufrieron cortes de electricidad pero, el domingo por la mañana, casi todas las casas habían recuperado la corriente.
En Mealhada, en el distrito de Aveiro, la final del campeonato europeo femenino de hockey sobre patines, entre Portugal y España, tuvo que ser interrumpida a dos minutos del final, ya que una parte de la cubierta del centro deportivo voló por los aires y cayeron fragmentos de materiales sobre la pista.
En Figueira da Foz, principal ciudad costera de la región de Coimbra, situada a unos 200 km al norte de Lisboa, los vecinos vivieron momentos de pánico."Nunca había visto nada así. La ciudad parecía en estado de guerra, con vehículos aplastados por los árboles caídos", declaró uno de ellos a la televisión privada SIC.
"Estuvimos bloqueados durante más de una hora en una sala de espectáculos, sin electricidad y sin red telefónica. La gente estaba muy preocupada", añadió.
Durante la noche, la tormenta alcanzó el extremo norte Portugal y siguió avanzando hacia España, aunque perdiendo intensidad.
La ciudad fronteriza de Zamora (oeste) registró ráfagas de viento de 100 km/h y en varias zonas de la región cayeron ramas y árboles.
España se vio muy afectada esta semana por las fuertes precipitaciones en la isla de Mallorca (este), donde 12 personas murieron en las inundaciones el martes.
En Portugal, Protección Civil había pedido a la población que se alejara de las zonas costeras y que evitara salir de sus domicilios.
Las autoridades pidieron a las flotas pesqueras regresar a puerto y la aerolínea TAP canceló una treintena de vuelos desde Lisboa o con destino a la capital portuguesa.
Según los registros meteorológicos citados en los sitios especializados, solo cinco huracanes llegaron a esta orilla del océano Atlántico, y "Leslie" sería el huracán más poderoso que golpea Portugal desde 1842.
El huracán "Vince" tocó tierra en el sur de España en 2005, el primer registro de ese tipo en 176 años.
En 2017 los fuertes vientos y la ola de calor que llevó el huracán "Ofelia" ante las costas de Portugal y de la región española de Galicia provocaron grandes incendios forestales que dejaron unos 40 muertos.
Ofelia se transformó luego en tormenta postropical y tocó tierra en Irlanda, donde mató a tres personas.