París, 28 feb (EFE).- Un vecino quincuagenario de la localidad de Pont sur Sambre, en el norte de Francia, detenido el pasado lunes por una agresión en Bélgica, ha confesado ser el autor de una cuarentena de violaciones y agresiones sexuales en ambos países durante los últimos 30 años.
El fiscal de Valenciennes, Jean-Philippe Vicentini, explicó este miércoles en una conferencia de prensa que "esta persona reconoce los hechos que se le imputan y explica que actuaba por impulsos que no controlaba".
El hombre, que según los medios responde a la identidad Dino S., con tres hijos y muy conocido en su pueblo por haber sido jugador, entrenador y presidente del equipo de fútbol, "evalúa el número de víctimas en una cuarentena" desde 1988, indicó Vicentini.
- Te puede interesar: Pena de muerte para hombre que descuartizó a mujer con una sierra
De momento, está imputado por 19 violaciones, pero los investigadores van a repasar otros casos no resueltos en la región para verificar si tienen su traza.
Su arresto se produjo por una agresión que cometida el pasado día 5 en Erquelines, una población próxima a Pont sur Sambre pero en territorio belga. Eso fue lo que permitió obtener su ADN, que coincidía con el de un violador al que la policía francesa seguía la pista desde 1996.
El alcalde de Pont sur Sambre, un pueblo de 2.550 habitantes, Michel Détrait, manifestó en declaraciones al canal France 3 su sorpresa por su carácter "sociable", por ser "un buen padre de familia, casi el yerno ideal" que cuidaba de sus hijos y de su mujer.
Por otro lado, la Policía española detuvo a ocho personas por intercambiar pornografía infantil con Estados Unidoa, Colombia, Argentina, México y Guatemala a través de internet.
Según informó la Policía, la operación policial tuvo origen en la región española de Navarra (norte), donde fueron arrestados dos hermanos que mantenían contactos con otros pedófilos tanto en España como en Estados Unidos y Latinoamérica.
La investigación se inició con una denuncia formulada por una ONG de Estados Unidos que alertaba de que un usuario de una conocida red social había publicado varias imágenes de pornografía infantil.