MOSCÚ (AP) — Una ventisca que castigó a Moscú, capital de Rusia durante el fin de semana demoró vuelos, cortó el suministro eléctrico a pueblos cercanos e incluso llevó a las autoridades a declarar un día no lectivo, algo poco habitual en esa ciudad muy acostumbrada a la nieve.
Durante el fin de semana cayó sobre la ciudad más nieve que en un mes medio, según dijo el lunes la Oficina de Meteorología de Rusia. En algunas zonas cayeron hasta 55 centímetros (22 pulgadas).
En una ciudad donde rara vez se cancelan las clases, el alcalde de Moscú, Sergei Sobyanin, dijo que no esperaba que los padres llevaran a sus hijos a la escuela el lunes.
Al menos más de 60.000 hogares en los alrededores de Moscú se quedaron sin electricidad durante el fin de semana, aunque el servicio se restableció este lunes.
En casi toda Europa las nevadas se encuentran imparables. Desde el pasado jueves, las bajas temperaturas han afectado a la práctica totalidad del territorio español. Más de 30 provincias, la mayor parte de ellas en la mitad norte del país, permanecen en alerta debido a las bajas temperaturas y la nieve. Se estima que esta situación podría mantenerse hasta el próximo miércoles.
El temporal ha causado el cierre de 53 tramos de carreteras y en 132 vías es ya obligatorio el uso de cadenas o neumáticos de invierno. En total hay más de 365 carreteras afectadas.
El ministro español de Fomento, Íñigo de la Serna, señaló ya el pasado jueves que, aunque estaba "todo preparado" para las "intensísimas nevadas" que se aproximaban, habría que estar alerta porque la situación se iba "a complicar mucho".