Portugal declara tres días de luto nacional por incendios

Lisboa, 16 oct (EFE).- El Gobierno portugués decretó hoy tres días de luto nacional, a partir de mañana, por la oleada de incendios que afectan al norte y al centro del país y que ha dejado más de una treintena de víctimas mortales.

El luto fue decretado como "forma de pesar y de solidaridad con toda la población nacional por los fuegos forestales que alcanzaron varios puntos del país, provocando la pérdida irreparable de vidas humanas", informó el Consejo de ministros en un comunicado.

Según el último balance oficial de Protección Civil, al menos 31 personas murieron y otras siete permanecen desaparecidas a causa de los incendios, aunque era una cifra "preliminar" porque había otra posible víctima por confirmar.

No obstante, medios locales informan de que el número de fallecidos subió a 35, citando fuentes de Protección Civil.

 

El primer ministro luso, António Costa, tiene prevista para esta noche una declaración pública al país sobre lo ocurrido.

Esta nueva tragedia llega tan sólo cuatro meses después de la tragedia que afectó al término municipal de Pedrógão Grande (en el centro del país), donde el fuego provocó la muerte de 64 personas y más de 250 resultaron heridas.

En aquella ocasión, el Ejecutivo portugués también decretó tres días de luto nacional. 

En contexto

Cuatro personas han muerto a causa de los más de cien incendios forestales declarados en la región española de Galicia (noroeste), donde se han quemado miles de hectáreas desde el viernes, favorecidos por el fuerte viento, las altas temperaturas y una prolongada.

En una comparecencia de prensa, el presidente regional, Alberto Núñez Feijóo, denunció hoy el "terrorismo incendiario" de quienes causaron el fuego, la muerte de estas personas y miles de hectáreas de bosque quemadas.

Las víctimas son un hombre de 78 años, que murió cuando intentaba salvar a sus animales en un pueblo de la provincia de Orense, informó hoy la Delegación del Gobierno español en Galicia, y dos mujeres que fallecieron en una furgoneta en la provincia de Pontevedra.