París, 9 oct (EFE).- Dos activistas de la asociación animalista L214 fueron condenados hoy a multas de 6.000 euros, 5.000 de ellos exentos de cumplimiento, por haber filmado sin permiso en un matadero en las afueras de París para denunciar el maltrato animal.
Según el dictamen del Tribunal de Versalles, los dos condenados, para los que la Fiscalía francesa pedía una multa de 15.000 (10.000 exentos de cumplimiento), fueron exculpados de "tentativa de violación a la vida privada".
El matadero, situado en Yvelines (este de París), pedía 215.000 euros por daños e intereses.
Las impactantes imágenes tomadas en 2016 por los activistas, quienes muestran con cámara oculta escenas de maltrato animal, como cerdos que sufren convulsiones antes de ser gaseados, conmocionaron a la opinión publica francesa e hicieron reaccionar al Parlamento.
Este órgano aprobó en enero de este año la introducción de cámaras en los matadores a partir de 2018 para evitar el maltrato innecesario de los animales.
En contexto
Investigadores alemanes han comenzado a analizar el origen de un millar de cráneos humanos procedentes de antiguas colonias germanas en África, proyecto piloto que guiará en el futuro el estudio de miles de restos óseos guardados en un museo berlinés y originarios de todo el mundo, de Sudamérica a Egipto.
La Fundación Patrimonio Cultural Prusiano, que engloba a los museos estatales de Berlín, presentó hoy el proyecto que inició este mes el Museo de Protohistoria y Prehistoria de la capital alemana.
Los más de 900 cráneos que se examinarán proceden de los territorios de las actuales Ruanda, Tanzania, Burundi y Mozambique y forman parte de la denominada colección S, reunida a finales del siglo XIX y principios del XX por el médico y antropólogo Felix von Luschan y de la que se conservan cerca de 5.500 cráneos.