Bruselas, 8 ago (EFE).- La policía belga detuvo hoy en Bruselas al conductor de un vehículo sospechoso de llevar explosivos, tras una persecución en el barrio de Molenbeek, e instaló un perímetro de seguridad en el que unas 400 personas estuvieron retenidas, informan los medios locales.
Según recoge la cadena "RTL", la policía abrió fuego contra el vehículo durante la persecución, que culminó con la detención del sospechoso, después de que este declarara, al salir del vehículo, que llevaba explosivos en el coche, lo que resultó ser falso.
Se trata de un ciudadano de Ruanda, nacido en 1981, residente en Bélgica hasta 2009 y afincado en Alemania desde entonces, informa la agencia Belga.
El hombre es desconocido por la justicia belga y tiene un "comportamiento bastante desequilibrado", según fuentes de la fiscalía citadas por "RTL".
Los artificieros finalizaron la operación y no detectaron nada "anormal" en el vehículo del sospechoso.
El suceso tuvo lugar a las 17.00 hora local (15.00 GMT), cuando la policía comenzó a perseguir a un vehículo que se había saltado al menos un semáforo en rojo.
El conductor del automóvil no obedeció al mandato de los agentes y colisionó con un primer vehículo policial.
Las fuerzas del orden utilizaron entonces un arma de fuego para tratar de inmovilizar el vehículo en fuga, pero este continuó su ruta antes de chocar con otro coche policial, que logró finalmente detener al sospechoso sobre las 17.30 hora local (15.30 GMT).
La policía instaló entonces un perímetro de seguridad en la zona después de que el detenido declarara que su vehículo contenía explosivos, según la agencia Belga.