Madrid, 5 jul (EFE).- La Policía española detuvo en la ciudad norteafricana de Melilla a un hombre argelino a quien las autoridades judiciales de su país buscaban por supuesta pertenencia a una organización terrorista dedicada a la preparación de acciones yihadistas.
Según informó el Ministerio del Interior español en un comunicado, sobre el detenido pesaba una orden internacional de detención, distribuida a través de Interpol.
El sospechoso fue arrestado por agentes de la Brigada Provincial de Información de la Jefatura Superior de Policía de la ciudad española de Melilla, y pasará a disposición de la Audiencia Nacional, en Madrid.
La detención se produjo tras "la identificación en frontera y posterior ejecución" de la orden internacional emitida por las autoridades argelinas.
Los responsables españoles de Interior destacaron las "excelentes relaciones de colaboración" existentes con el servicio antiterrorista de Argelia.
Desde el 26 de junio de 2015, cuando las autoridades españolas elevaron el nivel de alerta antiterrorista a 4 de 5, las fuerzas y cuerpos de seguridad detuvieron a 182 supuestos terroristas yihadistas en operaciones realizadas en España y en el extranjero, y 227 desde principios de ese año.
Una de estas operaciones fue el pasado 23 de junio, con la detención también en Melilla de un yihadista de origen marroquí y nacionalidad danesa, supuestamente implicado en una red internacional que evadía grandes sumas de dinero para financiar el envío de combatientes a Siria.
A finales de junio también las autoridades italianas repatriaron a Túnez a un ciudadano de 25 años considerado potencialmente peligroso para la seguridad del estado por mostrar signos de radicalización y compartir en las redes sociales propaganda yihadista.
El Ministerio del Interior italiano explicó en un comunicado que el tunecino fue trasladado a su país de origen con un vuelo que partió desde el aeropuerto de Roma Fiumicino.
El hombre residía en el municipio italiano de Scicli, en la isla de Sicilia, y fue investigado después de que las autoridades italianas evidenciaran que tenía relación con otros dos tunecinos expulsados de Italia en abril también por simpatizar supuestamente con el terrorismo yihadista.