El Ejecutivo estonio espera, a pesar de las negociaciones con el Reino Unido, que su presidencia esté marcada por la agenda digital.
Desde este sábado Estonia ostenta, hasta los próximos seis meses, la presidencia rotatoria de la Unión Europea (UE) con la presión de las negociaciones del brexit, es decir, la salida del Reino Unido de la comunidad.
Sin embargo, las autoridades estonias aseguraron que el brexit no marcará su presidencia y dejaron claro que su mayor objetivo al mando del bloque, es lograr una Europa digital y el desarrollo de un mercado único digital.
Tanto la presidenta del país, Kersti Kaljulaid, como el primer ministro, Jüri Ratas, y varios de los miembros de su Gobierno coinciden en sus encuentros con la prensa internacional en Tallin (capital) en que lo primero es lo primero, por encima del caso británico.
"El brexit no definirá esta presidencia, porque se trata de una negociación", sostuvo Kaljulaid.
La primera ronda de conversaciones entre la UE y el Reino Unido comenzaron el pasado 19 de junio.
"Nosotros vamos a ayudar para que la negociación sea rápida, y confío en que Reino Unido respete los derechos humanos en todo este proceso, porque es una democracia", dijo Kaljulaid.
En parecidos términos se expresó Ratas, quien reconoció que el brexit es un desafío, pero en su mandato abogarán más que todo en formar una Europa segura, competitiva, inclusiva y sostenible, que tenga la libertad de circulación de datos como la quinta libertad fundamental de la UE.
"Nuestro objetivo más importante durante los próximos seis meses es hacer una Europa más unida y más fuerte. Queremos encontrar un equilibrio justo entre los diferentes intereses y al mismo tiempo conseguir resultados tangibles para todos los europeos", señaló.