París, 22 jun (EFE).- Francia vivió ayer la jornada de junio más calurosa desde 1945 y la situación podría repetirse hoy, según Météo France, que puso en alerta naranja 71 del centenar de departamentos del país, la inmensa mayoría salvo en las costas del Mediterráneo y del Atlántico.
La media de las temperaturas del país alcanzó ayer 26,4 grados, por encima de los 26,2 grados del martes, cuando ya se había superado el récord precedente, que databa de junio de 2005 con 26,1 grados, según las cifras del servicio meteorológico.
Las máximas subieron hasta 38 grados en Auch (sur) o Limoges (centro), 37 en París, Toulouse (sur) o Burdeos (suroeste), 36 en Lyon (sureste) o Nevers (centro), 35 en Clermont Ferrand (centro), Grenoble (sureste) o Biarritz (suroeste), 34 en Nancy (noreste) o Lille (norte), 33 en Rennes (noroeste).
Los 37,4 grados de Le Mans (noroeste) constituyeron un máximo en un mes de junio, como los 37,1 en Orly (en el sur de París), los 36,8 en Tours (centro), los 34,9 en Dieppe (noroeste) o los 31,6 en Cherburgo (noroeste).
Además, por la noche la temperatura en París no bajó de los 23,7 grados, lo que también supuso un récord para este mes.
Météo France indicó que esta situación de canícula perdurará todo el día de hoy, aunque en la fachada oeste las temperaturas se empezaron a suavizar, algo que debería extenderse al resto de Francia el viernes.
Hasta que eso ocurra, para esta tarde se esperaban temperaturas de 38 grados en Toulouse, 37 en Lyon o 36 en París.
Esta ola de calor ha estado provocando desde comienzos de semana un episodio de contaminación por ozono que condujo a las autoridades a tomar medidas de restricción de la circulación, en particular en la región de París.
No podrán circular dentro del perímetro que determina la autopista de circunvalación A86 los coches diesel matriculados antes de 2006, los de gasolina anteriores a 1997, las motos anteriores al 1 de junio de 2000, las furgonetas anteriores al 1 de octubre de 1997 y los camiones y autobuses anteriores al 1 de octubre de 2001, entre otros.
Para incitar a utilizar el transporte público, además de las multas para los infractores (de 68 euros para los coches particulares, 135 para autocares y camiones), se estableció un billete único para hacer viajes durante toda la jornada por 3,80 euros por persona.
También hubo restricciones en la región de Marsella (sur) y el área de Lille.