Hamilton, 3 jun (EFE).- Dos mujeres se casaron hoy en el Registro General de la capital de Bermudas y se convirtieron en la primera pareja homosexual en contraer matrimonio en ese archipiélago.
La exministra del Partido Laborista Progresista (PLP) Renee Webb quien intentó, sin éxito, prohibir la discriminación por motivos de orientación sexual a través de legislación hace más de una década, dijo a los periodistas que asistió con orgullo al enlace entre la abogada Julia Saltus y Judith Aidoo.
"Estoy contenta de lo compasiva que puede ser la gente de Bermudas. Estoy orgullosa de mi trayectoria personal para ayudar a lograr la igualdad entre personas del mismo sexo. Felicitaciones por su valentía y demostración de amor -a la pareja-. El amor gana", dijo Webb.
El matrimonio tuvo lugar después de un fallo histórico de la Corte Suprema de Bermudas a favor de las bodas entre personas del mismo sexo, el 5 de mayo pasado.
Tony Brannon, un veterano artista local que lanzó una petición para legalizar el matrimonio entre personas del mismo sexo en 2015, dijo que lo conseguido es un éxito para toda la ciudadanía del territorio atlántico.
Dos hombres, Winston Godwin y Greg DeRoche, fueron quienes llevaron su deseo de casarse -que se espera que lleven a cabo en los próximos meses- a la Corte Suprema de Bermudas.
Godwin quería casarse con su prometido canadiense, DeRoche, en su tierra de nacimiento, por lo que lucharon por el derecho a su boda en este territorio británico de ultramar.
El Registro General rechazó su solicitud de casarse, por lo que la petición se llevó hasta la Corte Suprema con el argumento de que la ley de derechos humanos prevalece en Bermudas por encima de cualquier otra normativa.
La jueza Charles-Etta Simmons señaló en su sentencia que la actual ley de matrimonio en Bermudas es incompatible con las disposiciones de la Ley de Derechos Humanos, ya que constituyen un trato diferente deliberado sobre la base de la orientación sexual.
La letrada determinó que la actual ley local discrimina a las parejas del mismo sexo al excluirlas del matrimonio y que por lo tanto las personas sí tienen derecho a casarse, con independencia de su género.
La sentencia judicial prevalecerá a pesar de que en junio del año pasado en una consulta la población de Bermudas rechazó el matrimonio entre personas del mismo sexo, por un 69 % en contra frente el 31 % a favor.
En la consulta votaron 20.804 de los 44.367 registrados, por debajo del requisito del 50 %, lo que provocó que el referéndum no se considerara válido.