ANKARA, Turquía (AP) — Los fiscales en Estambul pidieron 40 condenas consecutivas a prisión perpetua para el hombre que atacó un club nocturno durante los festejos de Año Nuevo y mató a 39 personas, informó la agencia noticiosa estatal turca el martes.
El uzbeko Abdulkadir Masharipov fue capturado en Estambul tras una persecución de más de dos semanas. El grupo Estado Islámico se había declarado responsable del ataque al lujoso club Reina.
Según la agencia Anadolu, la procuraduría de Estambul pidió para Masharipov, de 34 años, cadenas perpetuas por cada asesinato y por el intento de subvertir el orden constitucional. También está acusado de pertenecer a un grupo terrorista, del intento de asesinar a las 79 personas heridas en el ataque y de otros presuntos crímenes, informó Anadolu.
También se piden sentencias de distinta gravedad _desde 15 años hasta perpetua_ para los 52 presuntos cómplices de Masharipov, informó la agencia privada Dogan.
Un tribunal de Estambul debe aprobar el acta de acusación antes de fijar la fecha del juicio.
Un abogado de oficio designado para representar a Masharipov no respondió de inmediato a los pedidos de declaraciones.
Según la prensa turca, Masharipov dijo en un interrogatorio que recibió la orden de perpetrar un atentado en la víspera de Año Nuevo desde Raqqa, la capital de facto del Estado Islámico, conocido también como ISIS, en Siria.
El ataque se produjo durante un período de extensión de medidas de seguridad en la ciudad, con 17 000 policías de servicio, después de varios ataques terroristas en los últimos meses. Como el atentado del Aeropuerto Internacional Atatürk de Estambul el 28 de junio de 2016 que mató a 48 personas, y un atentado con bomba en la Arena Vodafone el 10 de diciembre de 2016 que mató a 44.
Según el dueño de Reina, las medidas de seguridad en el club nocturno habían aumentado durante los diez días anteriores después de que los oficiales de inteligencia estadounidenses advirtieran sobre un ataque durante las vacaciones. La embajada estadounidense luego negó que tuviera información previa, desestimando tales afirmaciones como «rumores en las redes sociales».