Las autoridades rusas deben apoyar la investigación de las presuntas persecuciones de homosexuales en Chechenia, declaró este viernes el presidente ruso, Vladimir Putin, tres días después de que la canciller alemana, Angela Merkel, lo hubiera interpelado al respecto.
"He hablado con el fiscal general y el ministro del Interior para que apoyen" a la delegada para los Derechos Humanos del Kremlin, Tatiana Moskalkova, que investiga estos presuntos abusos, anunció Putin, según un comunicado del Kremlin.
Moskalkova tiene que comprobar "las informaciones o rumores, si podemos llamarlos así, sobre lo que ocurre en nuestro país, en el Cácauso norte, con gente de orientación sexual no tradicional", precisó a la salida de su encuentro con la delegada.
A finales de marzo, una investigación del diario independiente Novaia Gazeta reveló que los homosexuales estarían en el punto de mira de las autoridades de Chechenia, donde la homosexualidad es un tema tabú.
Según la publicación, las autoridades locales habrían detenido y torturado a más de 100 homosexuales. Homosexuales chechenos que huyeron a Moscú afirmaron que les habían dado palizas y que habían estado detenidos "en una prisión no oficial".
La Fiscalía general abrió una investigación pero las autoridades rusas apenas habían reaccionado al respecto. El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, había declarado que las informaciones de Novaia Gazeta "no estaban confirmadas".
El martes, en una conferencia con Putin, la canciller alemana, Angela Merkel, le pidió que hiciera uso de su "influencia" para que se respeten los derechos de los homosexuales en Chechenia.
El presidente ruso aprovechó la rueda de prensa para negar que Rusia tuviera intención de influir en las elecciones alemanes de este año, meses después de que se acusara a Moscú de interferir en los comicios estadounidenses. "Nunca nos entrometemos en la vida política o en los procesos políticos de ningún otro país", zanjó Putin.