Se despliega un fuerte dispositivo de seguridad en los colegios donde acuden los candidatos. La ultraderechista, Marine Le Pen, no pasará la noche electoral en París, algo inédito en la historia de los comicios en la nación gala.
En medio de un fuerte dispositivo de seguridad, los candidatos a la presidencia de Francia ejercen su derecho al voto este domingo en la primera vuelta de las elecciones en esa nación europea.
La candidata ultraderechista, Marine Le Pen, votó este domingo en su feudo electoral de Hénin-Beaumont, en el norte del país, donde también tiene previsto seguir toda la jornada.
Acompañada del alcalde de la ciudad, Steeve Briois, también del Frente Nacional (FN), Le Pen emitió el voto en medio también de una gran expectación mediática.
Es inédito en los últimos años que uno de los favoritos para superar la primera vuelta de unas presidenciales francesas no pase la noche electoral en París, donde estarán los otros diez candidatos.
En tanto, el candidato Emmanuel Macron, igualmente entre los que alcanzan mayor intención de votos, ejerció su el sufragio, acompañado de su mujer en la localidad de Le Touquet, en la costa atlántica del país, donde tiene una casa familiar.
Macron, que a sus 39 años aspira a convertirse en el presidente más joven de la historia de Francia, llegó al colegio electoral con amplio despliegue de policías, ante el elevado nivel de alerta que vive el país.
Por su parte, el candidato de Los Republicanos, François Fillon, votó sin la presencia de su esposa, Penelope Fillon.
Penelope ejerció su derecho al sufragio en un colegio electoral de Solesmes, en el departamento de Sarthe, en el norte de Francia.
El matrimonio está imputado por el contrato que Fillon hizo a su mujer como asesora parlamentaria, por el que habría ganado cientos de miles de euros en varios años.
El candidato de izquierda, Jean-Luc Mélenchon, entre los cuatro grandes favoritos, lo hizo en el Ayuntamiento del distrito X de París rodeado por sus principales colaboradores en la campaña y ante una gran atención mediática.
Con una amplia sonrisa, Mélenchon depositó su papeleta en las instalaciones municipales luego de haberse convertido en la gran sorpresa con una campaña que lo ha llevado a rozar el 20 por ciento en la intención de voto en los sondeos.