Un alumno de 17 años, resentido con algunos de sus compañeros y con problemas de integración, penetró hoy con un arsenal de armas en un instituto de Grasse, en el sureste de Francia, e hirió a cuatro personas, entre ellas el director del centro, lo que generó pánico en la zona.
El tiroteo fue "el acto loco de un joven frágil fascinado por las armas de fuego", según la ministra francesa de Educación, Nadjat Vallaud-Belkacem, que visitó el lugar de los hechos en los que otras seis personas tuvieron que ser atendidas.
Los hechos tuvieron lugar al mediodía y las escenas de pánico se sucedieron en el Instituto Tocqueville de la ciudad, en un momento en el que numerosos alumnos acudían al comedor.
El alumno, armado con un fusil, varias armas cortas, una granada de ejercicio y lo que parece ser un explosivo artesanal, entró en un aula en busca de ciertos alumnos, que no se encontraban en el lugar.
Los allí presentes vieron que estaba armado y alertaron al director, que cuando llegó no pudo evitar que el joven disparara contra otro estudiante y le hiriera.
El director trató de detenerle y resultó herido en un brazo en un acto que la ministra de Educación calificó de "heroico".
La rápida intervención de las fuerzas del orden evitó una masacre de mayores dimensiones y permitió arrestar al joven, que no opuso resistencia a los agentes, apenas cinco minutos más tarde de que comenzara el tiroteo.
En un primer momento, las autoridades activaron la alerta por atentado, lo que provocó que la ciudad fuera presa del miedo.
Un destacamento de fuerzas especiales de la Policía fue enviado al lugar y dado el gran arsenal de armas que portaba se pensaba que el joven podía contar con un cómplice.
Pero la investigación ha podido determinar que el menor no tenía ninguna motivación terrorista.