La carrera de Megan Fox no siempre ha sido fácil y aunque durante sus primeros años en Hollywood tuvo la oportunidad de hacer películas junto a Mary Kate y Ashley Olsen, Lindsay Lohan y Kaley Cuoco; reconoce que sus papeles eran básicamente lo mismo.
Una chica popular, la más guapa de todas; con una actitud de miedo y mil amigas detrás. La actriz logró establecerse como una de las caras bonitas del cine pop debido a su físico y talento; aunque lo primero es la razón por la que siempre la juzgaron.
Aunque el papel principal en Jennifer’s Body mostró un lado más auténtico y profesional de la actriz; su reputación seguía siendo la de una chica popular con mala actitud, y la película donde interpretaba a un demonio come-hombres empeoró las cosas.
«Creo que siempre ha habido una percepción de mí como una criatura superficial, al menos así fue durante toda la primera década de mi carrera. Recientemente, eso ha comenzado a cambiar, el público se ha tomado el tiempo de ver mis entrevistas anteriores, a escucharme y realmente verme de una manera distinta».
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Una de las entrevistas más controversiales es la de su aparición en el programa de Jimmy Kimmel Live en 2009, donde la actriz intentó relatar la terrible audición en la que fue forzada a bailar en bikini a los 15 años. ¿El resultado? La audiencia del programa lo tomó como algo gracioso.
«Ese fue un microsoma de toda mi vida y mi interacción con Hollywood. Fue algo muy oscuro. Me sentía tan perdida, intentaba entender cómo se supone que debo sentirme valiosa o encontrar un propósito en este horrible, misógino y machista infierno que es Hollywood. Porque ya había intentado denunciar el tema y todos, incluidas mujeres, me habían tratado mal por hacerlo».
Cansada de recibir los mismos papeles de chica bonita y mala, Fox tuvo que enfrentarse con problemas de autoestima justo antes de recibir a su primer bebé en 2012. Sin embargo, la actriz de Transformers admite que fueron sus hijos quienes la ayudaron a crecer estos últimos años.
«Quiero crecer como actriz. Siento que pasé muchos años evitándolo porque era mejor salir de Hollywood. Pero ahora estoy lista para crecer, desarrollarme y ser mejor».
