Liam Payne había requerido reanimación por sobredosis anteriores a su muerte

Foto: Liam Payne había requerido reanimación por sobredosis anteriores a su muerte
Foto: Liam Payne había requerido reanimación por sobredosis anteriores a su muerte

La muerte de Liam Payne, exintegrante de One Direction, ocurrió el 16 de octubre de 2024, cuando cayó del tercer piso del hotel CasaSur Palermo en Buenos Aires. La policía investiga el incidente, mientras conocidos del artista revelan que su consumo de drogas había sido un problema recurrente en su vida. Este no fue el primer episodio grave relacionado con su adicción.

Informes indican que Payne, de 31 años, había requerido reanimación en al menos una ocasión debido a sobredosis previas. Estas situaciones generaron preocupación entre sus amigos y familiares, quienes temían por su bienestar. A pesar de esto, su mánager decidió incluirlo en un proyecto televisivo poco después de su rehabilitación.

El programa «Building the Band», en el que Liam fue jurado, se grabó a principios de 2024 y buscaba ayudar a concursantes a formar sus propias bandas. Este proyecto fue desarrollado por Netflix junto a Nicole Scherzinger y Kelly Rowland, pero su lanzamiento se ha detenido tras la muerte del cantante. Netflix planea discutir el futuro del programa con la familia de Payne.

A pesar de las buenas intenciones de la producción, amigos cuestionan la responsabilidad detrás de su participación. Se plantea si se buscó asesoramiento médico para confirmar que Liam estaba en condiciones de filmar. Este dilema refleja preocupaciones sobre la salud mental de los artistas en la industria.

Foto: Liam Payne había requerido reanimación por sobredosis anteriores a su muerte
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El nuevo mánager aisló a Payne, lo que agravó su estado emocional y adicción

El nuevo mánager de Liam lo trasladó a Miami, aislándolo de su círculo cercano, lo que afectó su estado emocional. Fuentes afirman que este aislamiento contribuyó a su deterioro, rodeándolo de personas no beneficiosas. Su situación se volvió más preocupante en los meses previos a su muerte.

En sus últimas semanas, Liam vivía con su novia Kate Cassidy, con quien planeaba casarse. Cassidy dejó Argentina solo dos días antes del trágico accidente, lo que añade una capa de tristeza a la historia. A pesar de esta relación, la lucha de Liam contra la adicción persistió.

La adicción de Payne se había manifestado desde la pausa de One Direction en 2015, dejándolo devastado y perdido sin sus compañeros de banda. Un amigo cercano comentó que nunca se recuperó completamente de esa pérdida, lo que afectó su salud mental. Esta crisis personal se reflejó en su comportamiento en los últimos años.

La muerte de Liam ha generado un debate sobre la salud mental en la industria musical. Artistas como Sharon Osbourne y Bruce Springsteen han comentado sobre las presiones que enfrentan los jóvenes en el medio. Este trágico suceso resalta la necesidad de apoyo para los artistas en momentos difíciles, así como la urgencia de abordar problemas de salud mental en la música.